MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Relaciones Internacionales de Podemos, Pablo Bustinduy, ha celebrado el cambio de postura del PSOE ante el Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y Canadá, conocido como CETA --por sus siglas en inglés--, y ha manifestado que espera que su posible abstención sea sólo el primer paso y se convierta, en el futuro, en un claro rechazo que permita frenar el tratado en España y en Europa.
De este modo, el portavoz del partido morado en la Comisión de Exteriores del Congreso ha animado a los socialistas a que vayan más allá y les acompañen, primero, en la solicitud de control constitucional que volverán a reclamar en el Senado, y después, en el recurso que tienen previsto presentar ante el Tribunal Constitucional.
También espera que el PSOE aproveche la "muy buena relación" que tiene con "muchos partidos socialdemócratas" europeos y ayude a Podemos a convencerles de que cambien de postura, ya que si un sólo país de la Unión se niega a ratificar el tratado, éste no saldría adelante.
"Han cambiado de posición, es una buena noticia y un paso adelante en una larga lucha que dura ya más de tres años en el Parlamento Europeo y en la sociedad civil, y que Podemos en hemos abanderado en el Congreso", ha afirmado en declaraciones a los medios en los pasillos de la Cámara Baja.
Eso sí, tras destacar el "significativo" paso que, a su juicio, está dando el PSOE al replantearse su apoyo al CETA, Bustinduy ha insistido en la necesidad de que esa retirada de apoyo vaya más allá y se convierta en un rechazo para frenar el tratado.
"Es una buena noticia aunque llegue un poco tarde y que nos hace confiar en que vamos a ser capaces de parar este tratado frente a quienes alardean mucho de defender la soberanía nacional y luego la malvenden a multinacionales y poderes que nadie ha elegido", ha remarcado.
Entre las iniciativas que impulsarán para intentar frenar el CETA, en las que el apoyo del PSOE es crucial, está la petición de un informe al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la solicitud de control constitucional en el Senado --control que los socialistas rechazaron cuando Podemos la pidió en el Congreso-- y, por último, la presentación de un recurso ante el Tribunal Constitucional.
"Estaría muy bien que lo podamos hacer de manera conjunta con el PSOE. Es más, el CETA hay que ratificarlo en todos los países de la Unión Europea, y el PSOE tiene muy buena relación con muchos partidos socialdemócratas. Esperamos que nos ayuden a convencerles de que cambien de postura", ha añadido.
En este sentido, Bustinduy ha asegurado que "hay muchas cosas que se pueden hacer" y que, por ello, él se pone a disposición de los portavoces socialistas para poder trabajar juntos para que el CETA "no vea la luz del día".
FRENAR EL CETA, POR ENCIMA DE "LAS RELACIONES ENTRE PARTIDOS"
"Lo importante ahora, más que las relaciones entre partidos, es que seamos capaces de pararlo. Es otro 135 --en relación al artículo de la Constitución que el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero reformó con el apoyo del PP para priorizar el pago de la deuda--. Es una medida impuesta desde fuera para limitar nuestra capacidad soberana de gobernarnos a nosotros mismos", ha enfatizado.
De este modo, Bustinduy ha querido diferenciar esta cuestión de las relaciones entre Podemos y PSOE y ha negado que la postura que tomen los socialistas a este respecto sea "condición" para sentarse a negociar con el nuevo secretario general, Pedro Sánchez, medidas para hacer frente al Gobierno del PP.
A su juicio, se trata de "una muy buena ocasión para visibilizar y acumular fuerza". "Visibilizar un cambio de postura es una buena noticia. Lo importante no son las relaciones entre partidos sino parar el tratado", ha añadido.
Eso sí, ha reconocido que, como está, "habrá otras muchas ocasiones en las que habrá que posicionarse a favor de la soberanía popular o solo de los beneficios de las élites y los privilegiados".