Álvarez explica que se pagaría con un impuesto de entre el 2 y el 3 por ciento a las grandes fortunas, que recaudaría unos 10.000 millones
MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, ha explicado en una entrevista con Europa Press, que su formación incluirá en el programa electoral una renta básica garantizada para los hogares sin recursos que iría de los 600 a los 1.200 euros --en función de los miembros de la unidad familiar-- y tendría un coste de entre 10.000 y 12.000 millones de euros. Para poder hacer frente a estos pagos, la formación morada propone establecer un impuesto a los grandes fortunas de entre el 2 y el 3 por ciento.
Álvarez expone que, según la encuesta de condiciones de vida, a fecha de hoy habría unos 10 millones de personas que están por debajo del umbral de la pobreza en España. Para paliar esta situación, la formación morada incluirá en su programa una renta básica para los hogares sin recursos y que también complementaría los salarios más bajos. Sería compatible con los ingresos por el trabajo, ya que los perceptores no la perderían inmediatamente si encuentran un trabajo, sino progresivamente para "evitar la trampa de la pobreza".
La cantidad podría oscilar entre los 600 y los 1.200 euros, con escalas intermedias en función del número de miembros de la unidad familiar. Así, para un solo adulto, sería esos 600 euros; para unidades de convivencia con dos adultos computables, esta cantidad se incrementaría en un 50 por ciento y para el resto de unidades de convivencia, el umbral básico sumaría un 15 por ciento adicional por cada una de las restantes personas a computar, hasta 4 en total. En la propuesta de Podemos se prevé incorporar una prestación por hijo a cargo de unos 1.200 euros al año por menor. La suma de todo arrojaría una horquilla máxima de 1.200 euros al mes de renta garantizada para una familia de dos adultos con dos niños.
Esto supondría, según el dirigente de la formación morada, un coste de entre un punto y 1,2 puntos del PIB, es decir, entre 10.000 y 12.000 millones de euros. No obstante, explica que a medida que pase el tiempo, se siga creando empleo y se aumente el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), el coste iría disminuyendo.
Nacho Álvarez defiende la diferencia entre la renta básica que propone Podemos en relación con la propuesta que hace Ciudadanos. En este sentido, explica que la formación naranja propone un complemento salarial pero sin subir el SMI, lo que la convierte en una "subvención al empleo precario y al empleo de bajos salarios".
Sin embargo, explica que la que propone su partido tiene que ir acompañada de una subida del Salario Mínimo y afectará no solo a la población ocupada y con pocos recursos, sino también a la población que carece de recursos.
LAS GRANDES FORTUNAS PAGARÍAN LA RENTA GARANTIZADA
La intención de la formación morada es que este programa de renta básica garantizada se financie con un impuesto a las grandes fortunas, es decir, que se aplicaría a los declarantes que tengan más de un millón de patrimonio neto, después de descontar los créditos y con una exención de 400.000 euros, incluyendo la vivienda habitual. El número de declarantes que cumplen esas condiciones se eleva a 94.000.
El tipo a aplicar, según señala Nacho Álvarez, oscilaría en una escala progresiva que iría desde el 2 al 3 por ciento, en función de que el patrimonio sea superior al millón neto o a los 100 millones. Con ello, confían en recaudar "en torno a un 1 por ciento del PIB".
EL DEBATE EN EEUU Y EN FRANCIA COMO REFERENCIA
La propuesta que realiza Podemos toma como referencia, según explica Álvarez, la discusión que se está produciendo en Estados Unidos sobre este asunto, donde varios senadores demócratas están proponiendo un impuesto parecido. También se fija en las propuestas del economista francés Thomas Pikkety, especialista en desigualdad económica y distribución de la renta y director de estudios en la Escuela de Estudios Superiores en Ciencias Sociales de París.
Este último ha planteado, según apunta el dirigente de Podemos, la necesidad de avanzar en un impuesto de estas características en Europa, de un 2,5 por ciento del patrimonio. "Nosotros queremos en este punto ser innovadores" y "liderar una nueva fiscalidad del siglo XXI", alega Nacho Álvarez, quien justifica su propuesta en la necesidad de "revertir esta enorme desigualdad de renta que es todavía muy superior en el terreno del patrimonio". Según apunta, los patrimonios de las grandes familias están rindiendo a rentabilidades "muy por encima del 3 por ciento y del 10 por ciento también".
Al ser preguntado si no teme que estos contribuyentes se domicilien en otros países, explica no les "preocupa que pueda haber una deslocalización de fortunas" porque se trata del patrimonio que declaran las personas físicas, y no está articulado en torno a sociedades. Además, alega que aunque en Europa seguramente no haya un impuesto similar a éste que plantea Podemos, "sí que hay impuestos de patrimonio mucho más avanzados que en el de nuestro país, como el de Francia".
Sin embargo, sí admite que "habrá que estudiar" si se puede producir un trasvase de la tributación de estas fortunas a Sociedades. No obstante, asegura que a veces se dice que se van a producir estos movimientos y luego "no se producen". Insiste, en cualquier caso, que lo que les preocupa es tener "tantos agujeros, con tantos espacios por donde se pueden colar quienes tienen abogados y recursos para pagar menos impuestos".