MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
El PP ha decidido proponer al exministro Jorge Fernández Díaz como presidente de la Comisión de Peticiones del Congreso, una de las pocas donde no se vota la Mesa porque la Presidencia se adjudica al partido mayoritario.
La Comisión de Peticiones, que no tramita leyes ni recibe comparecencias, es la encargada de canalizar los escritos que registran los ciudadanos con peticiones a la Administración. Su misión, con el actual Reglmento, es enviar esas peticiones al departamento que considere oportuno y dejar constancia de la distribución en sus informes periódicos.
Se trata de una de las comisiones de composición reducida en las que sólo hay un diputado por grupo parlamentario y, si hay votaciones, se aplica el voto ponderado (cada uno representa los votos de su grupo en el Pleno). Dado su tamaño, no se vota la mesa, sino que la Presidencia se adjudica al representante del grupo mayoritario, mientras que el segundo grupo (ahora el PSOE) se hace con la vicepresidencia y el tercero (Unidos Podemos) con la secretaría.
Así fue nombrada presidenta de la comisión la gallega Pilar Rojo, que deberá abandonar ahora el puesto para dejar paso a Jorge Fernández Díaz. Según indicaron a Europa Press fuentes del PP, el escrito del relevo se ha registrado este jueves por la tarde.
TERCER INTENTO
La idea inicial del PP, una vez que Jorge Fernández Díaz fue relevado como ministro del Interior, era reubicarle como presidente de la comisión de Asuntos Exteriores, una plaza que hasta ahora ocupaba Jesús Posada.
Esa votación debía producirse este miércoles pero la propuesta del PP fue contestada por la oposición dado que el exministro ha sido reprobado por la Cámara y es objeto de una comisión de investigación por la supuesta utilización del Ministerio con fines partidistas. PSOE y Ciudadanos pensaban en principio votar en blanco, mientras que Unidos Podemos iba a presentar un candidato alternativo.
En ese contexto, y ante la amenaza del PSOE de dar un paso más y proponer su propio candidato, que podría haber recabado el apoyo de toda la oposición, el PP optó por dejar en suspenso la elección del presidente de la Comisión de Exteriores.
Así las cosas, y aprovechando que este miércoles también se constituía la Comisión Mixta (Congreso-Senado) de Relaciones con el Tribunal de Cuentas, el PP sondeó a los socialistas para colocar ahí a Fernández Díaz de presidente, pero los socialistas también se negaron y contestaron que mantienen su veto al exministro. Por ello, también quedó aplazada sin fecha la constitución de dicha comisión mixta.
Finalmente, se ha optado por destinar al exministro a la Comisión de Peticiones para dar por zanjada la polémica. Su acceso a la Presidencia de Comisión, que conlleva un complemento económico de casi 1.500 euros al mes, se formalizará en próximas fechas.