BARCELONA, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ex alto cargo de la Generalitat en los años de CiU Lluís Prenafeta, uno de los principales imputados en la trama Pretoria, pide en su libro 'La pesadilla' un cambio de Gobierno en Cataluña y muestra su apoyo a Artur Mas. "Sé que puede liderar un proyecto como el que necesita Cataluña", asegura.
En 'La pesadilla' (Editorial Columna), Prenafeta relata cómo ha vivido los últimos meses desde su detención, el 26 de octubre de 2009, y sus días en prisión, primero en Soto del Real, en Madrid, y más tarde, cuando fueron trasladados a Barcelona, en Brians, y también hace referencia a su mujer y sus hijos.
No obstante, dedica un capítulo titulado 'La razón de ser del catalanismo', a reivindicar la necesidad de un cambio de Gobierno, al considerar que es necesaria "una política eficaz y resolutiva" en Cataluña y pide volver al catalanismo "como único instrumento eficaz que puede garantizar un buen gobierno, un proyecto de país y una política solvente que lo haga posible".
Asegura que no hay otra alternativa "que no comporte sumisiones, dependencias o directamente asimilaciones".
Además, Prenafeta evidencia su apoyo explícito a Artur Mas, candidato de CiU a las autonómicas, a quien conoce desde hace muchos años. "Por experiencia propia, y no solo por fe ciega y fatalismo, sé que puede liderar un proyecto como el que necesita Cataluña", relata Prenafeta.
Define a Mas como un hombre que "no es capaz de perpetrar jugadas sucias y considerar al rival político como un enemigo".
En otro de los capítulos de su libro, Prenafeta recuerda que desde que en 1990 dejó la Secretaría General de Presidencia de la Generalitat, ha tenido cinco querellas, siempre relacionadas, de forma directa o indirecta, con su etapa política.
"Soy consciente de que he arriesgado mucho. Entré en política para hacer un servicio al país. Y no quería renunciar a sacar el máximo rendimiento de todas las posibilidades que se me ponían al alcance", asegura.
CRÍTICAS A GARZÓN
"Baltasar Garzón se ha inventado un delito que, lo diga como lo quiera decir, no existe", critica el ex alto cargo de CiU, que acusa al magistrado de haber desencadenado "una tormenta judicial" sobre "un desierto de pruebas".
Prenafeta se siente "una víctima total de una acumulación arbitraria de hechos absurdos" en los que no se puede reconocer, que le llevaron 43 días a la cárcel y asegura poder contestar a cada una de las afirmaciones que Garzón incluyó en su interlocutoria.
"Si no hubiera entrado en política me hubiera ahorrado todo el sufrimiento de ahora. Y a pesar de esto no me arrepiento", asegura.
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