El PSOE defiende que la figura de Miguel Angel Blanco "merece un reconocimiento" en el 20 aniversario de su muerte

MADRID 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Ejecutiva Federal del PSOE ha defendido este lunes que la figura de Miguel Angel Blanco "merece un reconocimiento" en el 20 aniversario de su muerte, pues su asesinato puso en marcha un "movimiento imparable" por parte de las sociedades vasca y española.

Sin embargo, la dirección del partido ha evitado censurar a los socialistas que en Bilbao y en algunos municipios de la provincia de Cádiz se han negado a apoyar homenajes específicos al concejal de Ermua al considerar que hay que recordar a todas las víctimas de ETA. "Todas las víctimas del terrorismo merecen ser recordadas", ha afirmado Narbona.

En rueda de prensa en Ferraz, la presidenta del PSOE ha puesto como ejemplo al Ayuntamiento de Valladolid, dirigido por el socialista Oscar Puente, que ha decidido poner el nombre de Miguel Angel Blanco a una calle de la ciudad y dedicar otra a las víctimas de la banda.

Sólo cuando los periodistas han insistido en conocer la posición del PSOE ante la negativa de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, de desplegar una pancarta en la fachada del Consistorio en recuerdo de Blanco, Narbona ha reconocido que Blanco merece un homenaje en el 20 aniversario de su muerte, lo que es compatible con defender que "todas las víctimas tienen el mismo derecho a ser recordadas y respetadas".

Narbona acompañará este martes al secretario de Política Federal del partido y exlehendakari vasco Patxi López al homenaje que se hará en Ermua a Blanco, "un hito en la lucha de la historia del terrorismo", una lucha en la que el PSOE ha contribuido en ocasiones como víctima y en otras proponiendo "respuestas", como el Pacto contra las Libertades y el Terrorismo.

La presidenta del PSOE ha recordado que ese pacto fue la primera medida que José Luis Rodríguez Zapatero adoptó como secretario general del PSOE en el año 2000, iniciativa que ofreció al Gobierno del PP y que el entonces vicepresidente Mariano Rajoy despreció interpretando que el "joven" socialista se había sacado "un conejo de la chistera".