MADRID 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El PSOE defiende que ya tomó medidas contra el exministro y exsecretario de Organización José Luis Ábalos, al ser cuestionados sobre las recientes informaciones que desvelan que utilizó un chalet de lujo vinculado al empresario Víctor de Aldama, involucrado en el llamado 'caso Koldo', y subrayan que actualmente no tiene ningún cargo orgánico ni institucional en el partido.
Así, la portavoz socialista, Esther Peña, ha evitado hacer una valoración al respecto al señalar que se trata de "una situación concreta que afecta a un ciudadano en particular", según ha indicado en una rueda de prensa desde la sede nacional del PSOE.
"El Partido Socialista tomó medidas de manera inmediata, por lo que entendimos que era una responsabilidad política", ha señalado Peña, después de que la dirección del partido le exigiese que entregase su acta de diputado y al negarse le suspendiese cautelarmente de militancia.
El PSOE tomó esta decisión después del estallido del 'caso Koldo', que investiga presuntas mordidas en contratos de material sanitario durante la pandemia de coronavirus, por "responsabilidad política", ya que uno de los principales investigados es Koldo García, que fue asesor de Ábalos durante su etapa como ministro de Transportes.
En la misma línea, sostiene que Ábalos no tiene responsabilidad orgánica alguna en el partido y tampoco forma parte "de la militancia" y por tanto considera que "él mismo podrá comentar" las informaciones que han aparecido en los últimos días.
Ante las acusaciones lanzadas por el Partido Popular, que dice que el presidente del Gobierno conocía estos actos de "corrupción" según los califican desde 'Génova' y los "tapó", exigen a los 'populares' estar a la altura de la "ejemplaridad" del PSOE y les afean que todavía tienen "más de 20 sumarios por corrupción pendientes de juicio".
En este sentido, señalan que la corrupción llegó a ser uno de los cinco primeros problemas más importantes para los españoles cuando gobernaba el PP y hoy ya no lo es. A su juicio esto se debe a que el PSOE y el Gobierno son "limpios" y actúan con "ejemplaridad y transparencia".