MADRID 5 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Socialista en el Senado, Óscar López, ha lamentado este jueves que el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, "no haya practicado" en España lo que la formación morada ha hecho en Granada, aupando al socialista Francisco Cuenca a la Alcaldía de esa localidad después de 13 años de gobierno del PP.
Cuenca se ha hecho con las riendas del consistorio granadino gracias a los ocho miembros de su grupo municipal, y al respaldo de los cuatro ediles de Ciudadanos, los tres de Vamos Granada y del de IU.
El apoyo recibido por Cuenca, entre otros de Podemos, evidencia, a juicio de López, que el acuerdo es posible cuando hay voluntad de llegar a un gobierno de cambio. "Ojalá Iglesias se hubiera fijado en Granada, donde parece que sí era posible", ha señalado.
El senador socialista ha subrayado que "se cae por su propio peso" el argumento de poner fin a la corrupción en Granada que el partido morado ha esgrimido para desalojar al PP del Ayuntamiento porque podía haberlo también podría habérselo aplicado a nivel nacional para expulsar de La Moncloa al presidente en funciones, Mariano Rajoy.
En este sentido, López también ha cuestionado que Podemos, al contrario de lo que ha venido defendiendo, haya compartido la misma posición que Ciudadanos apoyando al candidato socialista en Granada. "A lo mejor es que Ciudadanos no es de derechas" en esa ciudad, ha ironizado.
SÁNCHEZ, "PRESO" DE RIVERA Y DE SU COMITÉ FEDERAL
El responsable de Finanzas y Transparencia de Podemos, Segundo González, Segundo González, ha replicado a López que lo que en realidad ha demostrado al líder socialista, Pedro Sánchez, que un gobierno de cambio era posible ha sido todas las votaciones que durante esta breve legislatura han tenido lugar en el Congreso, donde se ha puesto de manifiesto que habría una mayoría suficiente para ese fallido ejecutivo.
"Ésa es la mayor prueba de que podía haber habido un gobierno de cambio", ha insistido González, lamentando, a renglón seguido, que, sin embargo, Sánchez se haya visto "preso" por el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y por su Comité Federal para no avanzar hacia ese gobierno progresista.