MADRID 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
El PSOE no encuentra apoyos en el Parlamento a su gestión con Argelia y, del mismo modo que se quedó solo cuando anunció el cambio de posición sobre el Sáhara, ahora que Argelia ha respondido suspendiendo relaciones, se ha encontrado con críticas de la oposición, pero también de sus socios de Podemos y de los aliados parlamentarios.
Para el líder el PP, Alberto Núñez Feijóo, la política internacional del Gobierno está siendo "improvisada" y espera que Argelia "no haga pagar" las consecuencias al pueblo español. "El presidente Pedro Sánchez prometió resultados, y el primero ha sido la crisis diplomática con un aliado estratégico como es Argelia", sostiene.
Más duro ha sido el expresidente José María Aznar, quien considera que el Gobierno ha hecho un "ridículo colosal" con Argelia y ha dejado a España en una "situación delicada". "Es difícil encontrar en la política española un error más grande", opina.
Desde Vox, su portavoz en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, ha pedido abiertamente la dimisión del presidente del Gobierno, pues considera que ha sido él quien "ha montado el lío" con Argelia al apoyar la propuesta marroquí para el Sáhara y quien hizo "el ridículo" en el Parlamento al negar "con soberbia" que ese giro tuviera consecuencias con Argel: "España no se merece este castigo", sostiene.
SE AVECINA REPROBACIÓN
Ciudadanos también considera "negligente" y "pésima" la gestión del Gobierno y ya ha anunciado que pedirá en el Congreso la reprobación del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. Según ha explicado Edmundo Bal, "hace nada" España mantenía buenas relaciones con Marruecos y con Argelia, pese a que ambos países estaban peleados entre si, y ahora Argelia ha suspendido las relaciones y hemos pasado a llevarnos "regular" con Rabat porque tampoco cumplen todo lo prometido.
Pero las críticas no sólo han llegado desde la oposición. También Unidas Podemos ha lamentado la situación culpando al giro de Sánchez sobre el Sáhara. Según la vicepresidenta Yolanda Díaz, es "claro" y que la nueva postura respecto de la antigua colonia tiene "consecuencias" y ha recordado que ella discrepa de ese giro debido al vínculo "emocional" entre España y el pueblo sahararui.
Por su parte, Esquerra Republicana y Bildu han mostrado su preocupación por las repercusiones que pueda tener las decisión de Argelia de no aplicar el tratado de amistad con España y de romper las relaciones comerciales entre ambos países, y han vuelto a exigir al presidente Pedro Sánchez, que rectifique y recupere la posición tradicional de España sobre el Sáhara.
En declaraciones en el pasillo del Congreso el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha vuelto a criticar la "frivolidad" de la decisión "unilateral" de Sánchez, al que ha acusado de "canjear principios con otras cosas".
De su lado la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, ha destacado que la decisión de Argelia puede afectar muy negativamente a las exportaciones de la industria vasca y ha pedido al Gobierno que ante esta "difícil situación", reconsidere su actual postura sobre la excolonia española.