AMBERES (BÉLGICA), 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha asegurado este sábado que si el exvicepresidente Oriol Junqueras y los otros exconsellers del Gobierno catalán son finalmente liberados el lunes será porque es "absolutamente insostenible" que tengan lugar las elecciones del 21 de diciembre con una "gran parte" de los candidatos en la cárcel.
"Están en prisión por razones políticas. Si finalmente son liberados es porque es absolutamente insostenible que haya elecciones con una gran parte de los candidatos en la cárcel", ha afirmado durante en un evento organizado en Amberes (Bélgica) por el periódico flamenco De Standaard.
En este sentido, Puigdemont ha insistido en que los exconseller están encarcelados tras haber llegado al poder en unas elecciones "completamente libres" en las que había "un mandato claro", al tiempo que ha subrayado que "han sido fieles a su contrato con la población".
El expresidente de la Generalitat ha sido entrevistado en francés durante unos 45 minutos por dos periodistas ante una audiencia de 500 personas, más de la mitad del aforo, que contaba con unas 800 localidades. Puigdemont ha sido despedido al término de la entrevista con algunos aplausos de la audiencia y el regalo por parte de los organizadores de "vino francés", que le han entregado antes de abandonar el escenario.
Durante el acto, el expresidente de la Generalitat ha remarcado que su programa de cara a las elecciones catalanas es continuar con el proyecto independentista. "Mi programa es el de continuar el camino que empezamos no el 1-O sino en septiembre de 2015, hacer un estado independiente", ha respondido.
Sin embargo, ha evitado profundizar en sus propuestas cuando las periodistas le han comentado que habrá catalanes que quieran hablar de economía y problemas sociales. "Es lo mismo, la agenda. El programa de la independencia es porque hemos llegado a la conclusión de que si no teníamos la gestión de los instrumentos de un Estado no podríamos sobrevivir", ha manifestado.
SOBRE LA DUI: "HAY ACTOS SIMBÓLICOS QUE SON SERIOS"
Antes, una de las periodistas le ha preguntado si la declaración de independencia fue un acto "serio o simbólico", a lo que Puigdemont ha contestado que "hay actos simbólicos que son serios". Posteriormente, ha afirmado que el Govern era "consciente" de que sin el reconocimiento por parte del Gobierno español de que existe "un problema político" es "difícil comenzar una negociación de transición", pero era necesario "parlamentarizar los resultados".
En cualquier caso, ha señalado que la Generalitat no esperaba lo que ha calificado como "ola de represión" del Ejecutio central, sino que esperaban "subrayar" que existe un problema político enorme" que requiere "política".
"Lo hemos dicho claramente, no tenemos un botón para declarar la independencia, no somos tan ingenuos", ha apuntado, para después decir que esto sería "irreal" y añadir que es necesario también "reconocer cuántos catalanes quieren comenzar ese camino y cuántos no".
"EUROPA ES MI PATRIA"
Por otro lado, preguntado por sus últimas críticas a la UE, Puigdemont ha recalcado que se dirigen a las instituciones comunitarias y no a Europa en sí, porque ha dicho que Europa es su "patria". En este sentido, ha criticado que las instituciones europeas no hayan denunciado la actuación del Gobierno español, que a su juicio ha "violado" la Carta Europea de Derechos Fundamentales.
"¿No hay nada que decir sobre la Carta de Derechos Fundamentales sobre lo que pasó el 1 de octubre?", se ha preguntado a sí mismo durante la entrevista, antes de señalar que hubo "una contradicción flagrante de derechos democráticos fundamentales".
"No esperábamos nada sobre el reconocimiento de la independencia, porque no teníamos ninguna esperanza de reconocimiento europeo, pero sobre la violencia política, sobre derechos fundamentales, esperábamos alguna reacción de las instituciones europeas", ha expresado.
Posteriormente, sobre el hecho de que tampoco los Estados miembros hayan apoyado la actuación de su Govern, Puigdemont ha recordado que "ha sido así en todos los casos previos de independencia". "Es evidente que los Estados no quieren que nada cambie", ha zanjado.