El presidente en funciones, convencido de que será investido y no habrá terceras elecciones por "sentido común"
MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno en funciones y candidato del PP a la reelección, Mariano Rajoy, ha afirmado este miércoles, con cierto sarcasmo, que "está dispuesto a hablar" con el socialista Pedro Sánchez y "no pedir la dimisión" del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, para "facilitar las cosas" después de la jornada electoral del próximo 26 de junio.
En su primera aparición en el popular programa de televisión 'El Hormiguero', de Antena 3, Rajoy también se ha mostrado convencido de que no habrá una tercera convocatoria electoral porque "al final se impondrá el sentido común" y logrará el apoyo de otras fuerzas políticas, en alusión al PSOE y Ciudadanos, que son, en opinión del presidente del Gobierno, las que coinciden "en lo fundamental" de sus programas. "Aunque tengamos nuestras discrepancias y nuestras historias", ha admitido.
De este modo, Rajoy ha insistido en que "intentará" hablar con todas las formaciones tras el 26J, incluida Podemos, para proponer un pacto de gobierno entre el PP, PSOE y Ciudadanos como planteó tras las generales del pasado 20 de diciembre. "Habría sido muy positivo y nos habríamos ahorrado el espectáculo de estos meses", ha dicho el líder del PP calificando la nueva convocatoria electoral como "una situación rocambolesca".
De este modo, Rajoy ha sido sarcástico al precisar que está dispuesto a hablar con Pedro Sánchez, que se negó a negociar con el PP un pacto de investidura, y a no reclamar la dimisión de Albert Rivera, que solicita que Rajoy se eche a un lado y renuncie a la presidencia del Gobierno para sentarse a hablar con los populares.
"Mi intuición me dice que no habrá terceras elecciones", ha insistido el presidente en funciones, que argumenta su vaticinio en su convencimiento de que "el grado de irresponsabilidad" de otros partidos "tendrá el listón en algún sitio", por lo que acabarán apoyando a la lista más votada en las elecciones.
"Salvo que Rivera y Sánchez quieran hacer presidente al señor Iglesias, pero no me parece que sea la mejor alternativa para España", ha señalado, para después criticar con ironía al candidato de Unidos Podemos. "Es un hombre que tiene unas convicciones profundas, antes era de extrema izquierda y ahora es socialdemócrata", ha dicho un Mariano Rajoy, que se ha mostrado relajado durante toda la entrevista.
SOBRE CATALUÑA: "AL FINAL LAS COSAS SE ARREGLAN"
El presidente del Gobierno en funciones también ha reclamado "diálogo" para resolver la cuestión catalana. "Al final las cosas se arreglan", ha asegurado, aunque ha vuelto a marcar como incuestionable la unidad de España y la igualdad de todos los españoles. Además, Rajoy ha subrayado que la singularidad de Cataluña ya está recogida en la Constitución, como ocurre con otras regiones como Euskadi, Navarra y Canarias.
"España es un país que trata los que no son iguales de forma desigual que es lo lógico", ha dicho textualmente, aunque Rajoy ha precisado que "en derechos, deberes y oportunidades" los españoles deben "ser iguales". "España no es un país perfecto, pero es uno de los mejores del mundo", ha proclamado.
Durante la entrevista, Rajoy no ha evitado ser preguntado por los casos de corrupción que durante los últimos años han protagonizado políticos y cargos públicos del Partido Popular, negando que conociera ningún de ellos hasta que fueron destapados. "Si hubiera tenido información, hubiera actuado", ha asegurado.
En este sentido, Rajoy ha calificado como "muy duro y desagradable" que se revelen estos casos de corrupción, y se ha comprometido a "hacer lo posible" para que "no vuelvan a ocurrir nunca más".
RAJOY NO TOCA UNA PISTOLA DESDE LA MILI
Rajoy también se ha enfrentado a un cuestionario más personal durante su visita al programa 'El Hormiguero' presentado por Pablo Motos y ha desvelado anécdotas de sus cuatro años en La Moncloa. "Hay una cosa llamativa, cuando eres presidente te das cuento que por encima de ti no hay nadie", ha confesado cuando se le preguntaba por sus primeros días como presidente.
El candidato del PP también ha desvelado que en La Moncloa existe un teléfono "para hablar sin que se entere nadie" que no ha utilizado nunca por su complicado protocolo. "Y es negro", ha precisado. El palacio de residencia del presidente lo ha calificado como "una casa muy grande y que materialmente está muy bien", y a pesar de su amplitud, asegura que nunca se ha perdido, ni al despertarse por la noche. "Yo por la noche estoy durmiendo y no doy paseos", ha zanjado.
En un tono más distendido, a Rajoy se le ha preguntado por si alguna vez ha tenido la tentación de pedir a su escolta el arma para pegar algunos tiros. "No he usado una pistola en mi vida salvo cuando hice el servicio militar en Valencia, y allí algunos tiros sí pegue, y era bastante malo", ha relatado.
Además, Rajoy se ha tomado con humor algunos de sus despistes verbales, como aquel protagonizado en Benavente (Zamora) cuando dijo aquello de que "es el vecino el que elige el alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde", una frase incongruente que se ha emitido en su presencia.
"Cuando hablas mucho tienes más posibilidades de equivocarte, pero esto del alcalde y los vecinos no sé por qué lo dije... Pero si alguien tiene alguna duda, no es el alcalde el que elige a los vecinos", ha sentenciado sonriendo.