El presidente recuerda que la gobernabilidad de España no es sólo cuestión de los cuatro grandes, sino también de los nacionalistas
MADRID, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, espera recuperar pronto "la normalidad" con el PNV y ha recordado la relación que ambos mantenían entre 2012 y 2015, cuando aprobaban leyes juntos pese a que el PP tenía mayoría absoluta y no necesita aliados.
En su réplica, Rajoy ha dicho no entender las críticas del PNV cuando, según ha recordado, aprobó 56 leyes con los nacionalistas vascos en la legislatura de mayoría absoluta del PP, y entre ellas la renovación de la Ley del Concierto. "No tengo conciencia de ser tan malo como se deduce de su intervención", ha comentado.
Rajoy ha negado las "ansias de recentralización" que le achaca el PNV y ha subrayado que su Gobierno ha atendido siempre las preocupaciones de los vascos y ha buscado la colaboración del Gobierno vasco. Otra cosa, ha añadido, es que no siempre haya accedido a las pretensiones del PNV.
NEGAR LA REALIDAD
"Puede usted no votar mi investidura, tiene perfecto derecho, y puede hacer las consideraciones que quiera, pero yo no he dicho ninguna palabra sobre el PNV --ha replicado--. Una cosa es su posición, otra es negar la realidad".
Tampoco aprecia Rajoy motivos para la animadversión del PNV en el pacto suscrito con Ciudadanos --"Ha leído cosas que ni están escritas", ha dicho"--, y justifica la mención a la unidad de España. "¿Pensaba que yo iba a venir aquí a defender algo distinto de la unidad de España? Me tendría que haber pasado algo", ha apostillado con sorna.
El portavoz del PNV, que rebaja a 30 el número de proyectos del Gobierno del PP que apoyó su partido, sostiene que hay muchas cuestiones pendientes con el Gobierno central derivadas de incumplimientos del Estatuto de Gernika y por falta de inversiones.
Y ha añadido que lo que PP y Ciudadanos pactan contra Cataluña también afecta al PNV, que se siente concernido porque considera igualmente que Euskadi es una nación, como Cataluña. "Y usted no respeta nada", se ha quejado.
CATALANES SON TODOS, TAMBIÉN LOS NO INDEPENDENTISTAS
Rajoy ha querido dejar claro que su debate no es con Cataluña, sino con los independentistas, ya que en esa comunidad "hay de todo", y ha pedido respetar los sentimientos de unos y otros catalanes. "Y no hagamos un debate de sentimientos --ha pedido--. Mejor argumentos y razones, por muy humanos que sean los sentimientos".
En todo caso, y habida cuenta de que hay elecciones en el País vasco el 25 de septiembre, ha expresado su deseo de recuperar pronto la normalidad porque, según ha dicho en otro momento, el Gobierno no sólo es responsabilidad de PP, PSOE, Podemos o Ciudadanos, sino también de las fuerzas de ámbito territorial. "Y usted también representa a la soberanía nacional, incluso a Pontevedra", ha remachado.
Por último, ha insistido en que "nadie tiene el nivel de autogobierno del País Vasco", con un "enorme margen de autonomía" por su capacidad de fijar tipos impositivos, y ha aprovechado para elogiar que haya cumplido con los objetivos de déficit, como Canarias y el Gobierno central, algo que a su juicio "da mucha credibilidad".