MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Equipo de Intervención en el Exterior de la Policía Nacional ha liberado ya a 43 españoles en América, Asia, Europa y África desde el año 2001. Los últimos han sido los dos ciudadanos rescatados en México tras permanecer tres días en una cámara frigorífica, a oscuras y sin colchón.
Esta unidad de la Policía Nacional tiene entre sus cometidos el apoyo operativo a las autoridades locales con el desplazamiento de expertos en casos de homicidios, desapariciones o, como en este último caso, secuestros ocurridos fuera de España.
Para ello cuenta con el apoyo de la División de Cooperación Internacional y las respectivas Consejerías de Interior de las Embajadas, así como de la Unidad de Emergencia Consular del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
La Fiscalía de Puebla (México) avanzó ayer --madrugada en España-- que dos ciudadanos españoles habían sido liberados en México tras permanecer tres días secuestrados en una cámara frigorífica. Fueron capturados cuando se dirigían a su puesto de trabajo en una empresa española.
Pocas horas después de tener conocimiento del rapto, se activó el Equipo de Intervención en el Exterior de la Brigada Central de Delitos contra las Personas de la Policía Nacional y dos agentes especializados viajaron hasta México para colaborar con la Fiscalía del estado de Puebla, encargada de la investigación de los hechos, y servir de enlace de comunicación directa con la misma.
En el operativo desarrollado por parte de los grupos tácticos de la Policía Estatal de Puebla han sido arrestadas dos personas encargadas de la custodia de los españoles. Posteriormente fue arrestado un tercer implicado, presuntamente responsable de la organización del secuestro.
La Fiscalía de Pueblo difundió unas palabras de agradecimiento de José Javier Galante, inspector de la Sección de Secuestros y Extorsiones de la Policía Nacional de España. "La colaboración internacional ha sido exquisita desde el primer momento", ha apuntado este responsable policial, que también ha agradecido la confianza de las familias, además de la Embajada y otras instituciones.
SECUESTRO CON ARMAS LARGAS
En la tarde del pasado lunes, la Consejería de Interior de la Embajada de España en México comunicó urgentemente que dos ciudadanos españoles habían sido secuestrados a las 6.00 hora mexicana en la carretera de la zona de Lomas de Angelópolis.
Tres empleados de una multinacional española salían de su domicilio hacia su puesto de trabajo cuando el vehículo en el que se desplazaban fue interceptado y golpeado por otros dos turismos. Entonces, varias personas con armas largas les encañonaron y obligaron a introducirse en los coches de los asaltantes.
Uno de los ciudadanos españoles logró escapar y esconderse de los secuestradores. El vehículo en el que iban los españoles fue abandonado por los asaltantes dejando en su interior los ordenadores y otros efectos de valor, lo que indicaba que se trataba de un secuestro organizado y bien planificado.
El joven español que logró escapar comunicó inmediatamente el rapto a la Unidad contra el Secuestro del Ministerio Público de Puebla y a la Coordinación Nacional Antisecuestro mexicana. Tras llegar el aviso a la Comisaría General de Policía Judicial, se activó de manera inmediata la Red Nacional de Negociadores para asesorar al presidente de la empresa en la que trabajaban los secuestrados.
PETICIÓN DE 1,3 MILLONES DE EUROS
Los captores habían solicitado telefónicamente un rescate de 1.350.000 euros por su liberación, por lo que dos negociadores de la Policía Nacional se desplazaron hasta la sede de la empresa para asesorarles en las comunicaciones que pudieran recibir. Los investigadores sospechan, según ha informado la Policía Nacional, que los delincuentes tenían planeado matarles tanto si pagaban por su rescate como si no.
Fruto de las gestiones realizadas de manera coordinada entre las autoridades de España y México, en la madrugada del día 30 se logró averiguar el lugar de cautiverio, procediendo al asalto por parte de los grupos tácticos de la Policía Estatal de Puebla.
La intervención culminó con la liberación de los dos españoles secuestrados y la detención de dos personas que les custodiaban. Las víctimas habían permanecido retenidas en el interior de una cámara frigorífica desconectada, a oscuras y sin colchón. A pesar de que uno de ellos había sido agredido ambos fueron localizados en buen estado de salud.
Posteriormente fue también detenido el antiguo gerente de seguridad de la empresa para la que trabajaban las víctimas, un ciudadano de nacionalidad mexicana que había sido despedido hacía un mes y que presuntamente había organizado el secuestro gracias a los datos que conocía como ex trabajador de la mercantil española. La operación policial sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.