MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) - La decisión del Rey Juan Carlos de abandonar la actividad institucional se hará efectiva oficialmente a partir de este domingo 2 de junio, cuando se cumplen cinco años desde el anuncio de su abdicación, según el comunicado que difundió la Casa del Rey esta semana. El 2 de junio fue la fecha elegida precisamente por esta efeméride, porque lo cierto es que el Rey 'emérito', de 81 años, no ha tenido agenda oficial en las últimas semanas. Su última actividad institucional fue, el día 17 de mayo, la entrega del Premio Órdenes Españolas 2019 al historiador Miguel Ángel Ladero en el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. Así, aunque esta semana ha podido vérsele en la plaza de toros de Las Ventas, esos actos no forman parte de su actividad institucional, sino de la privada, y no constan en la agenda de la Familia Real que difunde Zarzuela. También será a título privado su presencia, este domingo, en la plaza de toros de Aranjuez, en un acto en el que se rendirá homenaje a su madre, María de las Mercedes de Borbón. De este modo, la intención de Don Juan Carlos de "completar" su "retirada de la vida pública", según la expresión que él mismo utilizó en la carta que escribió a su hijo para comunicarle formalmente su decisión, se traducirá en que no actividad institucional. Sin embargo, sí mantendrá actividades privadas y podrá participar en los actos públicos que considere oportunos, solo que en ellos no tendrá un papel de representación del Estado. El Rey Juan Carlos recibe cada año una asignación procedente de la partida de los Presupuestos Generales del Estado destina a la Casa Real, conforme al artículo 65 de la Constitución, que señala que "el Rey recibe de los Presupuestos del Estado una cantidad global para el sostenimiento de su Familia y Casa, y distribuye libremente la misma". En 2018 y en 2019 (puesto que los Presupuestos han sido prorrogados), esa asignación anual asciende a 194.232 euros. Además, desde su abdicación, el Rey dispone de una Secretaría de apoyo, que dirige el Alfonso Sanz Portolés -que es además consejero diplomático de Felipe VI-- y, como todos los miembros de la Familia Real, está aforado ante el Tribunal Supremo. En la carta que dirigió a Felipe VI para anunciar su decisión, el Rey 'emérito' detallaba que ha estado "madurando" esta idea desde su 80 cumpleaños, y que se reafirmó en ella "con motivo de la inolvidable conmemoración del 40 Aniversario" de la Constitución en las Cortes Generales, "un acto solemne" y "lleno de emoción" para él. "Me hizo evocar, con orgullo y admiración, el recuerdo de tantas personas que contribuyeron a hacer posible la Transición política y renovar mi sentimiento de permanente gratitud hacia el pueblo español,verdadero artífice y principal protagonista de aquella trascendental etapa de nuestra historia reciente", decía el texto, difundido por el Palacio de la Zarzuela. Don Juan Carlos precisaba que, aunque desde su abdicación, ha desarrollado actividades institucionales "con el mismo afán de servicio a España y a la Corona" que le inspiraron durante su reinado, cinco años después cree que ha llegado el momento de "pasar una nueva página" de su vida y retirarse definitivamente de la vida pública. "Con una firme y meditada convicción, hoy te expreso mi voluntad y deseo de dar este paso y dejar de desarrollar actividades institucionales, a partir del próximo 2 de junio", señala el texto, añadiendo que toma esta decisión "desde el gran cariño y orgullo de padre" que siente por él y con su "lealtad siempre". En la carta, el ex jefe de Estado se dirige a su hijo como "Majestad, querido Felipe" y se despide: "Un grandísimo abrazo de tu padre".