Subraya en Oxford que, en tiempos de incertidumbre, la "vocación moral" de la Universidad es importante frente a la xenofobia, el racismo o la desigualdad
OXFORD (REINO UNIDO), 14 (de la enviada especial de EUROPA PRESS Carolina Jiménez)
El Rey Felipe VI ha puesto el broche final este viernes su visita de Estado a Reino Unido con un discurso en el que ha afirmado que "la colaboración científica transnacional y el libre intercambio de ideas, así como la movilidad y la libre circulación del talento, están en la propia esencia de la Universidad, y también son la base de la gestión moderna del conocimiento".
"El conocimiento se comparte con alumnos procedentes de todo el mundo", ha dicho en su visita a la Universidad de Oxford, y ha remarcado que España y el Reino Unido se sitúan entre los países que más comparten sus estudios y avances científicos, hasta el punto de que el Reino Unido es el segundo socio en colaboraciones científicas de España, y España es el octavo socio en colaboraciones científicas del Reino Unido.
En la última jornada de un viaje que ha estado muy centrado en atender las incertidumbres que plantea el Brexit, el jefe de Estado también ha recibido en Londres a una representación de científicos españoles (asociados en CERU) preocupados porque la investigación británica perderá fondos europeos y por su propio futuro en el país.
En Oxford, el Rey ha destacado que Reino Unido es, precisamente, un ejemplo de red de universidades globales, con un 28 por ciento del profesorado procedente de la Unión Europea, y hasta un 41 por ciento en el caso de Oxford. "Esta labor de atracción del talento explica en buena parte su éxito y su prestigio continuados a lo largo de la historia", ha dicho, en una intervención en la que ha señalado que la internacionalización forma parte del propio concepto de Universidad.
Felipe VI ha pronunciado, íntegramente en inglés, el sexto y último de sus seis discursos en esta visita de Estado en un almuerzo en el Divinity School de la Universidad de Oxford, ante un centenar de invitados por el rector, Christopher Patten. Después, los Reyes se encontrarán con una representación de la comunidad académica en Exeter College. Este centro alberga la Cátedra de estudios hispánicos que fundó el bisabuelo del Rey, Alfonso XIII, que este año cumple su 90 aniversario, y con la Cátedra Reina Sofía de Literatura.
La propia Universidad se ha volcado en destacar en esta visita sus vínculos con España. Hace días que impartió un taller a niños de 8 y 9 años -como parte de un proyecto para vincular a las escuelas públicas con la Universidad-- sobre la Familia Real española. Los niños elaboraron un mosaico con azulejos inspirados en los de la Alhambra de Granada que los Reyes han podido ver a su llegada a la Biblioteca Weston, una parte de la Biblioteca Bodleian que data de 1602 y es la segunda más grande de Reino Unido, solo por detrás de la British Library.
Allí los Reyes han podido ver tesoros relacionados con España, como el Códice Mendoza, un manuscrito sobre los aztecas encargado por el primer virrey de México para entregárselo a Carlos V; el mapa de Tolomeo, un mapamundi tallado en madera publicado en Ulm en 1486 que perteneció a los Reyes Católicos, y una primera edición del Quijote. Todo ello se lo ha mostrado la jefa de Conservación de la Biblioteca Bodleian, la española Virginia Lladó-Buisán.
Por Oxford han pasado al menos 30 dirigentes internacionales, 50 premios Nobel y 120 medallistas olímpicos. Sus aulas han contado con españoles ilustres como Juan Luis Vives, Severo Ochoa, Jorge Guillén y Dámaso Alonso. Miguel de Unamuno recibió un doctorado honorífico en 1936.
AGRADECIMIENTO A ISABEL II
En este foro Felipe VI se ha despedido oficialmente de Reino Unido, remarcando que ha podido "tener contacto con el Gobierno, el Parlamento, con relevantes actores económicos y por último con su mundo científico y académico".
"Tengan la certeza de que no olvidaremos estos días, en los que hemos percibido la calidez del pueblo británico y sus instituciones hacia España. Como tampoco podremos olvidar que han sido posibles gracias a la generosidad de Su Majestad la Reina Isabel y su familia", ha finalizado.
VOCACIÓN MORAL EN TIEMPOS DE INCERTIDUMBRE
En su discurso, el jefe de Estado ha destacado el papel de la Universidad en favor del progreso, pero también, en "tiempos de incertidumbre", ha hecho hincapié en que su "vocación moral" es "más importante que nunca para luchar contra fenómenos como la xenofobia, el racismo o la desigualdad".
"Ninguna universidad puede ser ajena a fenómenos como el envejecimiento de la población, el cambio climático, el deterioro del medio ambiente, la sostenibilidad energética, las grandes epidemias, la brecha tecnológica y económica entre los países del norte y del sur, las guerras y sus causas, la intolerancia o el fenómeno de las migraciones", ha dicho.
Y es que, a su modo de ver, la Universidad "está obligada a detectar los problemas que aquejan a nuestras sociedades postindustriales incluso antes que la clase política, y a proponer soluciones basadas en la experimentación y en el conocimiento".
El Rey ha destacado como el diálogo entre las universidades más antiguas de Europa ha aportado todo un sistema de valores que definen a Occidente: "la libertad de expresión y de cátedra, la autonomía académica, la curiosidad intelectual, la investigación y publicación generosa de sus resultados" así como los de "comunidad, participación y, más recientemente, el de igualdad de oportunidades".
Sin embargo, también está obligada a mirar al futuro, "a crear nuevas disciplinas, a ser eficiente, eficaz, creativa, a atraer talento, y a ir más allá de la experimentación científica básica -sin abandonar esta- para contribuir al desarrollo económico del país" en un diálogo" con los poderes públicos que despliegan estrategias nacionales y regionales y planifican el crecimiento" y "con los sectores productivos más dinámicos de la sociedad".