Lastra advierte de que la memoria de los españoles no se borra como la de un ordenador y Santamaría le aconseja no imitar a Podemos
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El PSOE y el Gobierno han protagonizado este miércoles un nuevo rifirrafe en la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso a cuenta de los principales casos de corrupción en los que se han visto implicados socialistas y 'populares'.
Todo empezaba con la pregunta que la 'número dos' del PSOE, Adriana Lastra, ha dirigido a la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría. Lastra ha pedido al Gobierno asumir responsabilidades políticas por la trama 'Gürtel' y le advertía de que la memoria colectiva de los españoles "no se borra tan fácil como la de un ordenador", en alusión a la destrucción de los discos duros de los ordenadores que usaba en la sede del PP el extesorero Luis Bárcenas.
Lastra ha recordado que hace una semana, en la comisión de investigación sobre la financiación ilegal del PP abierta en el Congreso, el inspector de la UDEF Manuel Morocho, jefe de la investigación del caso 'Gürtel', señaló que "indiciariamente" el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y otros dirigentes 'populares' estaban mencionados como beneficiarios en los denominados como 'papeles de Bárcenas'.
También dijo, ha añadido la diputada, "que existen indicios de que la estructura del PP respondía al perfil de una organización delictiva". "Lo que ha dicho el inspector es muy escandaloso, pero tampoco es nada novedoso. La única novedad es escucharlo en esta Cámara directamente del responsable policial que destapó la 'Gürtel'", ha remarcado.
EL PP INTENTA QUE LA 'GÜRTEL' SE OLVIDE
Lastra ha acusado al PP de llevar "años ocultándose en lo primero que encuentran para intentar hacer olvidar que la 'Gürtel' nació en las entrañas del Partido Popular, que desde su partido se ha tejido una red de tramas corruptas por todo el país y que nadie ha asumido responsabilidades políticas".
"No pueden con el peso de los finiquitos en diferido, los ordenadores destruidos, los SMS pidiendo fortaleza (de Rajoy a Bárcenas), los jaguars en los garajes (de la exministra 'popular' Ana Mato), los payasos en las fiestas, las noches locas en el Pigmalion, los sobres de dinero negro repartiéndose para todos, los millones de euros en comisiones ilegales sustraídos de políticas para la ciudadanía. Esto no se va a olvidar", ha advertido Lastra.
LAS URNAS AVALAN AL PP
La vicepresidenta se ha defendido recordándole a Lastra que los ciudadanos, en las sucesivas elecciones, confían más en el PP que en el PSOE, partido responsable, ha subrayado, del "mayor fraude que ha existido en este país, los ERE" en Andalucía por el que los expresidentes de la Junta Manuel Chaves y José Antonio Griñán se sentarán próximamente en el banquillo como acusados.
Sáenz de Santamaría ha recordado a Lastra que, este martes, en la misma comisión de investigación sobre la financiación del PP, el jefe del inspector Morocho, el comisario José Luis Olivera, "desmintió su versión".
Olivera defendió que fue el deseo de Francisco Correa de "hacerse rico" lo que motivó que montara con otros empresarios una trama destapada a raíz del caso Gürtel, con un operativo que él mismo lideró desde la UDEF. También ha destacado que el comisario dijo que serán los tribunales los que determinen si también hubo políticos del PP directamente implicados.
Sáenz de Santamaría también ha recordado a Lastra que este martes comparecía el extesorero del PSOE Xoan Manuel Cornide en la comisión de investigación en el Senado sobre la financiación de los partidos y reconocía haber renegociado con los bancos en plena crisis la deuda de 40 millones que arrastraba desde 1987 y por la que ha pagado sólo seis millones de euros.
"Hasta donde yo sé, a los españoles nos dan el 80% del crédito del valor de nuestro piso, a ustedes les perdonan el 80% de la deuda. ¡Menudo director del Tesoro de España que se ha perdido este país con el señor Cornide!", le ha espetado la vicepresidenta.
Sáenz de Santamaría también le ha aconsejado a los socialistas que no traten de imitar la estrategia de Unidos Podemos para atacar al Gobierno porque están "a la baja" en las encuestas sobre intención de voto.