Rivera dice que los discursos del PP y Podemos en el ámbito educativo o laboral "se parecen mucho" por su "inmovilismo"

Pide a Hacienda que antes de fin de mes paralice la prescripción de los acogidos a la amnistía fiscal para que paguen más

MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha dicho este martes que los discursos del PP y Podemos en los ámbitos educativo y laboral "se parecen mucho" porque son "profundamente inmovilistas" al negarse a "modernizar el sistema".

En un desayuno informativo del Foro Next IBS, Rivera ha indicado que a partir de ahora habrá que ver "si Podemos se suma a la vía reformista, si empuja para convencer al PP y al PSOE" de que hay que cambiar determinadas políticas, "o si es rupturista o incluso inmovilista".

En su opinión, "al final los discursos del PP y de Podemos" en el ámbito laboral o el de la educación "se parecen mucho". "Porque son profundamente inmovilistas, no quieren modernizar el sistema" y "no nos permiten avanzar como país", ha apuntado, augurando que en estos próximos años se van a ver "extraños compañeros de cama" en la política española.

Frente a eso, ha pedido a los distintos partidos que en esta legislatura dejen a un lado "los dogmas y los viejos tics" y piensen, "sin complejos y sin apriorismos", cuáles son "las soluciones necesita España en un mundo globalizado".

Según Rivera, en estos tiempos en que "la dicotomía ya no es izquierda o derecha", sino "inmovilismo, populismo o reformismo", hay que apostar por esta última opción, que es la que representan, a su modo de ver, Justin Trudeau en Canadá, Barack Obama en EEUU o C's en España.

TRUMP Y PODEMOS

Por otro lado, el líder del partido naranja ha dicho que los "populistas" como Donald Trump, el partido griego Syriza, el Frente Nacional francés o Podemos en España "no generan grandes adeptos" allí donde gobiernan.

"A veces, la gente, cuando prueba la receta la aborrece", ha afirmado, antes de rechazar las soluciones "mágicas" de los populistas y reclamar soluciones reales para la "clase media venida a menos" que apoya a esos partidos por su insatisfacción con la "vieja política".

CONFÍA EN QUE EL GOBIERNO CUMPLA LO PACTADO

Para llevar a cabo las reformas que cree que el país necesita, Rivera ha pedido al nuevo Gobierno de Mariano Rajoy que cumpla las 150 exigencias contenidas en el acuerdo de investidura que el PP y Ciudadanos firmaron el pasado agosto.

Si el Ejecutivo cumple, se podrán "cambiar más cosas en unos meses o unos años que en 40 años"; pero si se dedica a "ignorar a la Cámara, ignorar los cambios que la sociedad española necesita e ignorar el futuro", entonces esta será "una legislatura corta y mala", ha advertido.

El presidente de C's ha dicho confiar en que Rajoy respetará los compromisos adquiridos porque, a su juicio, ha ido a la investidura y ha formado Gobierno "para gobernar cuatro años", no para "tocar el botón y acabar con la legislatura" de forma anticipada.

Rivera ha defendido que las reformas del pacto entre los dos partidos se pueden llevar a cabo porque hay una tabla de ingresos y gastos que dice cómo se financian.

RECUPERAR EL DINERO DE LA AMNISTÍA FISCAL

Además, ha insistido en que C's rechazará "meter la mano en el bolsillo de la clase media" subiéndole los impuestos y hacer recortes en sanidad, educación o dependencia, porque los ingresos deben obtenerse reclamando el dinero a los defraudadores fiscales o con la reforma del Impuesto de Sociedades.

En este contexto, ha exigido al Ministerio de Hacienda que antes del 30 de noviembre envíe una carta a los defraudadores que se acogieron a la amnistía fiscal para poder paralizar la prescripción de esa ley y así disponer de 18 meses para exigirles que paguen el 10% del capital aflorado, como inicialmente reclamó el Gobierno, en vez del 3% que finalmente abonaron.

Por último, Rivera se ha referido al futuro de su partido y ha señalado que su objetivo es crecer y conseguir el apoyo de votantes "moderados de centro izquierda o de centro derecha". Para ello ve necesario que Ciudadanos sea visto no solo como un partido que "pide al Gobierno que haga cosas", sino como una "opción de gobierno".