MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha avisado este martes de que la desinformación es un "enemigo terrible" que busca "corroer" las instituciones y "menoscabar" los principios de las sociedades democráticas.
En su intervención en la I Jornada contra la Desinformación, organizada por el Club Abierto de Editores (CLABE) y celebrada en Casa de América, la titular de Defensa ha urgido a luchar contra este "enemigo tan terrible", poniendo en valor el papel del Periodismo para contrarrestarlo.
La ministra ha reclamado investigaciones periodísticas "rápidas, rigurosas y, sobre todo, transparentes" y que "frente al encubrimiento, el silencio o el oportunismo para, en ocasiones, dar un titular llamativo", la verdad ha de ser "constatable".
Robles considera "necesario" invertir en información para lograr sociedades "más resilientes y más seguras de sus valores" y, en este línea, también ha abogado por "educar" a los ciudadanos en la "estima" y el "aprecio" por las instituciones y poderes públicos.
"No podemos olvidar que nuestra democracia está en este momento de amenaza porque, fundamentalmente, los enemigos de los valores democráticos no son los ejércitos", ha hecho hincapié. En este escenario, el Periodismo, a su juicio, cobra un papel "decisivo" en las sociedades democráticas.
También con el telón de fondo de la invasión rusa de Ucrania y el conflicto en Israel y Gaza, la desinformación exige que haya medios de comunicación. Así, Robles ha loado el papel de los periodistas que arriesgan sus vidas para informar sobre conflictos armados.
LA DESINFORMACIÓN, TAN ANTIGUA COMO LA GUERRA
Durante su intervención, la ministra ha reflexionado sobre el uso de la información y la desinformación como instrumentos en conflictos armados, "tan antiguo como la propia guerra". "Existen referencias a la utilización de guerras comunicativas en contextos bélicos de hace más de 2.500 años", ha recordado. En referencia a la propaganda y la intoxicación, ha señalado que su utilización se hizo más evidente en el siglo XX.
Pero Robles ha señalado que "la revolución tecnológica ha propiciado un aumento exponencial de estas acciones, tanto en magnitud como en frecuencia y eficacia" y ha puesto el foco en la utilización de herramientas automáticas de divulgación de bajo coste y con una compleja trazabilidad, que incrementa de forma "considerable" su "repercusión e impacto".
Según ha explicado, hay dos tipos de operaciones de desinformación en conflictos armados según su objetivo: las dirigidas hacia la opinión pública propia o enemiga y las dirigidas a las fuerzas militares también propias o enemigas. Las primeras requieren una "estrecha dirección política" y las segundas son estrictamente militares.
Por último, la ministra de Defensa en funciones también ha querido advertir sobre las consecuencias de los ciberataques, "destinados a lesionar la opinión pública de un Estado" y que, de ser exitosos, "sus daños no se limitarían a pérdidas económicas o materiales, sino que podrían erosionar la naturaleza y razón de un sistema democrático".
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