MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha acusado este martes al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, de "jugar" para que el PSOE sea la tercera fuerza política en las próximas elecciones y ha asegurado que no se plantea en ningún caso abstenerse para que el PP siga en el poder.
Así lo ha señalado el candidato socialista a las elecciones generales durante un encuentro informativo organizado por el diario 'El Mundo', en el que ha insistido que el PSOE está "en mejores condiciones" para obtener un buen resultado el próximo 26 junio que el pasado 20 de diciembre.
Sánchez ha defendido que es el PP el que intenta que cale la idea del 'sorpasso' de Podemos al PSOE y ha apuntado incluso que "el mejor jefe de campaña" del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, "se llama Rajoy". "Mariano Rajoy ha jugado a que el PSOE sea la tercera fuerza política en este país, juega a eso", ha afirmado.
Y es que, en su opinión, el partido del presidente del Gobierno en funciones lo que quiere es "que el PSOE deje de ser la alternativa al PP". Y, mientras tanto, ha defendido, Podemos lo que busca es superar a los socialistas.
Además, Sánchez, que ha insistido en que su objetivo es ser la primera fuerza política el 26 de junio, ha asegurado que no se abstendrá para que gobierne el PP si es el partido más votado. "No me lo planteo, lo descarto", ha afirmado.
Eso sí, ha insistido en que cree que el PSOE va a tener un mejor resultado que el pasado 20 de diciembre, aunque las encuestas digan lo contrario. Para ello, ha dicho, se apoya en "la experiencia" que le indica que "los españoles quieren más al PSOE que las empresas demoscópicas". Como prueba, ha subrayado que antes del 20D, los sondeos daban a los socialistas entre 10 y 15 escaños menos de los que obtuvieron.
Así, ha explicado que cuando promete que no habrá terceras elecciones quiere decir que si el PSOE es primera fuerza política España tendrá en muy poco tiempo "un gobierno socialista, limpio y dialogante". En ese caso, ha dicho, cree que "quienes dijeron no" en su investidura el pasado marzo "no van a poder sostener" ese rechazo ahora.
PIDE AL PP QUE LE DEJE GOBERNAR, PERO ADMITE QUE ES "CIENCIA-FICCION"
Pero, además, ha precisado que España es un sistema parlamentario en el que "quien gana la liga no es quien gana más partidos, sino quien acumula más puntos". De esta manera, ha pedido directamente al PP que después del 26 de junio "no vete a la fuerza política que obtenga más escaños".
Sin embargo, en otro momento del encuentro, cuando se le ha preguntado directamente si aceptaría ser presidente del Gobierno con la abstención del PP, ha dicho que eso es "ciencia ficción".
Sánchez ha cargado contra la actitud del PP en los últimos meses y ha defendido que Rajoy se situó en el bloqueo --"renunció a ser gobierno y renunció a ser oposición"-- y ha remachado que en esa postura "encontró un aliado" que fue el líder de Podemos. "Iglesias y Rajoy son dos caras del mismo problema que se llama bloqueo", ha remachado.
A partir de aquí, y de cara a lo que ocurra después del 26J, ha defendido que su objetivo es hablar de soluciones y no de sillas ni de siglas. Y por eso, ha explicado, él ya ha presentado un documento con los seis principios básicos que ofrece al resto de fuerzas para el acuerdo, con el aval de la "capacidad de diálogo y la voluntad de llegar a acuerdos" que han "demostrado estos cinco meses".
Así ha asegurado que no va a "vetar a ninguna fuerza política del cambio", incluyendo a Podemos, pero ha recalcado que si el PSOE es la primera fuerza política "los que dijeron no, dirán que sí". Y a esto, ha remachado, "tendrá que responder Iglesias".
Sánchez ha asegurado que no duda de que el líder del partido morado tenga como objetivo acabar con el gobierno de Rajoy, pero ha lamentado que "siempre antepondrá" a eso su voluntado de "bloquear" la llegada del PSOE a La Moncloa.
Esto, a su juicio, es lo que se vio después del 20D, porque cree que Podemose no tenía un problema de contenidos con el PSOE, sino con ayudar a un socialista a llegar al Gobierno.
Sin embargo, se ha mostrado optimista al defender que si el PSOE mejora su resultado y es la primera fuerza "el ala moderado de Podemos", en la que sitúa al secretario político de este partido, Iñigo Errejón, y a otros dirigentes que, como él, "sí eran más proclives a entenderse con el PSOE", se impondrá esa tesis para que los dos partidos puedan "entenderse".
De hecho, ha defendido que cuando Errejón "lideró" las negociaciones, avanzaron y hubo más reuniones y cuando Iglesias tomó el mando, el diálogo sólo duró doce horas. De hecho, ha defendido que la reunión con Ciudadanos y Podemos fue bien, o así lo aseguraron los dirigentes del partido morado, pero después salieron con la rueda de prensa en la que anunciaron la consulta a sus bases para "bloquear cualquier tipo de acuerdo".
Sánchez no ha querido explicar si Iglesias le parece de fiar, pero ha remachado que él fue "honesto" y no podrán decir que le ha "engañado". De hecho, ha asegurado que cuando el líder del partido morado le propuso una coalición, él le aseguró que no tenía "ningún problema" en buscar una fórmula para gobernar juntos pero le quiso dejar claro que "un gobierno en coalición nunca se puede argumentar en base a la desconfianza" que Podemos decía tener en el PSOE.
De cara al futuro, aunque no ha querido dar nada por sentado, sí ha vuelto a hablar de formar un gobierno de coalición cuando se le ha preguntado si exigiría también el apoyo a los presupuestos generales dos años. Sánchez ha explicado que "evidentemente cualquier gobierno de coalición debe tener apoyo" para aprobar las cuentas públicas, especialmente teniendo en cuenta "la patata caliente" que va a dejar el PP.