MADRID, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha advertido este sábado que los enemigos de Europa no están solamente en Moscú, sino que se encuentran en todos los proyectos políticos de ultraderecha que "socavan las bases" de la convivencia y, en este sentido, ha pedido al líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, que "mire más" a la derecha europea que preside Donald Tusk.
Sánchez ha asegurado durante la intervención en un acto del PSOE en Madrid que la guerra de Ucrania no se circunscribe a una "disputa territorial" entre ambos países, sino que tiene que ver con un "ataque a los valores y un intento brutal de debilitamiento de Putin de lo que representa la Unión Europea" y ha pedido ser conscientes de que el presidente ruso "lo que quiere es debilitar a Europa".
En este sentido, ha recalcado que los que persiguen este objetivo también se encuentran en Madrid y en París, en las elecciones que mañana celebra Francia y en las que aspira a la Presidencia Marine Le Pen. Así, ha hecho hincapié en que Putin ha tratado de debilitar Europa durante "muchos años" mediante "campañas de desinformación" o apoyando "proyectos políticos de ultraderecha que tienen en su ADN el debilitamiento del proyecto europeo".
"Se equivocan aquellos del espacio conservador que piensan que la ultraderecha es conservadora. La ultraderecha no es ni conservadora porque no quiere conservar ninguno de los logros de la humanidad poniendo en cuestión a la ciencia o los avances en igualdad", ha apostillado Sánchez.
Así, ha señalado que la pregunta que hay que hacer "sin ambages" a la derecha es que ojalá que en este tiempo que ha abierto después del cambio de liderazgo "mire más a la derecha europea y menos a la ultraderecha española". "Si la pregunta es Europa o la ultraderecha, los socialistas lo tenemos claro", ha zanjado.
El líder del Ejecutivo ha aprovechado la ocasión para poner en valor el proyecto europeo y la "suerte de orgullo" que supone pertenecer a él, sentimiento que ha aumentado, en sus palabras, como consecuencia de la respuesta que han dado los gobiernos europeos a la pandemia.
"Se habla de patriotismo europeo como una comunidad de valores, como una idea que representa cuestiones que vemos amenazadas, el respeto a los derechos humanos, la libertad, la prosperidad, la cohesión tanto social como territorial", ha deslizado Sánchez, que ha concluido asegurando que ha habido "un fortalecimiento del Estado del bienestar" a diferencia de lo que ocurrió en Europa en la respuesta a la crisis financiera.