Insiste en que España es una "democracia plena" y que no se puede justificar la violencia en las calles ni desentenderse de ella
MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha querido dejar claro que será el Gobierno quien regule la reforma de los delitos de opinión, enfriando así la proposición de ley que registró Unidas Podemos en el congreso antes de las elecciones catalanas con idea de acelerar su tramitación.
Según ha explicado ante el Pleno del Congreso, el ministro "competente" en la materia, el titular de Justicia, el socialista Juan Carlos Campo, ya expresó la voluntad de reformar la ley en relación con los delitos de odio. "Y lo vamos a hacer, como adelantó el ministro" ha remarcado.
A su juicio, la libertad de expresión está sujeta a ciertos limites, que deben ser iguales para todos, y para ello hay que buscar desde el Gobierno "el máximo respaldo posible".
Y en cuanto a los incidentes violentos producidos en las manifestaciones por la libertad del rapero 'Pablo Hasél', ha subrayado que eso "nada tiene que ver con la libertad de expresión".
LA VIOLENCIA ES LA PEOR PROPAGANDA
"El peor servicio a la defensa de la libertad de expresión es el recurso a la violencia, pues nada hay más opuesto a cualquier libertad que el recuso a la violencia --ha dicho--. A quienes justifican el uso de la violencia como medio para llamar la atención sobre un problema, debo decirles que es la peor propaganda porque atrae toda la atención sobre el hecho violento y la desvía del tema".
A partir de ahí, ha remarcado que "el gobierno se opone a todo tipo de violencia" y no se desentiende de ella. Y mientras que el vicepresidente Pablo Iglesias cuestionó la plena normalidad de la democracia española, el líder del PSOE ha zanjado: "Ninguna democracia plena puede desentenderse la violencia y España es una democracia plena".
En su opinión, "la democracia ampara la libertad de expresión y de manifestación", y "ampara expresiones hasta infames", pero lo que no ampara es ninguna situación de violencia".