VALENCIA, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, ha advertido este miércoles que España "no merece ser gobernada ni por la pereza de Rajoy ni por la intransigencia de Iglesias", sino que "merece la socialdemocracia". Además, ha asegurado que "el cambio no tiene intermediarios" y quien lo quiera debe decir sí a los socialistas porque, ha continuado, una vez gane las elecciones será "mucho más generoso" de lo que otros lo han sido con él.
Sánchez ha llegado pasadas las 19 horas a la Casa de Cultura de Burjassot, donde ha sido recibido entre aplausos y banderas que portaban los 1.200 asistentes, que en algunos momentos del acto han lanzado gritos de 'Pedro presidente'. Le acompañaban el secretario general provincial, José Luis Ábalos, y la cabeza de lista por Valencia, Ana Botella, entre otros.
Según ha dicho, el 26 de junio habrá unos cuantos caminos que "perpetúen a Mariano Rajoy como presidente" y otro que garantice el cambio, la papeleta del PSOE. Por ello, ha invitado a los ciudadanos que quieran cambio a que apuesten por su partido porque él, si gana las elecciones, no vetará "a ninguna fuerza política del cambio". "Tendremos que contar con todos y será en las políticas y no en los sillones donde me entenderé con todos", ha remarcado.
Ha incidido en que "el cambio no es exclusivo del PSOE" pero si algo ha aprendido en estos cinco meses desde el 20D es que "si no gana el PSOE no habrá cambio en el país". Así, tras mostrarse convencido de la victoria el próximo 26 de junio, ha recordado que el socialista es "el partido del cambio" y no necesita más que cuatro letras, que se han mantenido durante 137 años y "así va a seguir siendo". "Lo digo porque, al paso que van, algunos van a tener que presentarse con papeletas apaisadas", ha afirmado.
Sánchez se ha referido en varias ocasiones al candidato de Podemos, Pablo Iglesias, con el que ha querido diferenciarse: "¿Sabéis cuál es la diferencia entre Iglesias y yo? Que yo sí que soy de izquierdas, porque la izquierda siempre es internacionalista, no independentista, la izquierda es tolerancia, no intransigencia".
Ante los aplausos de los asistentes, ha señalado que no discute que el líder de Podemos tenga entre sus prioridades poner fin al gobierno de Rajoy, aunque aquí "a diferencia de las matemáticas, el orden de los factores sí altera el producto" y cree que Iglesias antepondrá siempre a este propósito "que no haya un gobierno socialista con un presidente socialista".
El candidato socialista ha remarcado que la única victoria que esperaban los españoles es que hubiera un acuerdo para ese cambio, pero hubo partidos que "se dicen de izquierdas" que bloquearon la investidura y, con ella, medidas como recuperar la sanidad universal o revitalizar la ley de dependencia. A su juicio, "la nueva política es dejar atrás el 'y tu más', es hablar de las cosas que nos unen y no de las que nos separan, de cosas que son las soluciones y no de sillas y sillones", ha remarcado.
También ha criticado que la primera fuerza, el PP, renunciara a presentarse a la investidura y ha aseverado que su mayor fracaso hubiera sido "haberle dicho no al jefe del Estado y haber renunciado a la investidura", aunque también ha admitido que pensaba que podía llegar a entenderse con Pablo Iglesias, a quien ha reprochado que el 21 de diciembre comenzara poniendo la autodeterminación como línea roja, después sus cuatro grupos en el Congreso, la exigencia de la vicepresidencia o, por último, la propuesta de un presidente independiente.
"Esta ya sí que es de nota", ha dicho, para censurar que "alguien que se aúpa en el Congreso al grito de no nos representan" pretenda que haya un presidente "no votado por los españoles". Ante esto, ha asegurado que tras el 26J habrá un presidente votado por los españoles y que, además "está en este anfiteatro", ha asegurado.
"UNA ENCRUCIJADA"
Pedro Sánchez ha indicado que España está "ante una encrucijada" y afronta, tras cuatro años de "un mal gobierno que ha usado la crisis como excusa para desmantelar el Estado del Bienestar", desafíos que trascienden las fronteras ante los que es necesario un gobierno socialista.
"Soy hijo de clase media, padre de clase media y si tengo el honor de ser presidente del gobierno defenderé a la clase media de este país", ha subrayado, antes de recordar que el 20 por ciento de la población española "vive con menos de 8.000 euros al año". Ante esta situación, ha dicho, hay tres tipos de actitud: "La de Rajoy de insuflar miedo, la de Iglesias de romper con todo" y la de los socialistas de ver en los desafíos "grandes oportunidades" para que la sociedad española "se pueda ganar el futuro". "No quiero que digan sí al PSOE por miedo ni con rencor, que nos voten con ilusión de cambiar las cosas, de hacer de España un país mejoro", ha afirmado.
Ha recordado algunas de las propuestas socialistas, como derogar la reforma laboral, el plan de empleo recientemente presentado para parados de larga duración y mayores de 45 años, la rebaja al 10% del IVA cultural o la paralización de la LOMCE.
HUCHA DE LAS PENSIONES
Asimismo, Sánchez ha apuntado que los socialistas dejaron la hucha de las pensiones con 66.000 millones de euros y hoy está "a la mitad", con lo que "si sigue Mariano Rajoy no habrá hucha de las pensiones". En este sentido, ha recordado la propuesta de los socialistas de no aumentar las cotizaciones a la Seguridad Social, pero sí crear "un recargo solidario que paguen las grandes corporaciones, las grandes fortunas". "Queremos reconstruir el Pacto de Toledo para garantizar las pensiones de hoy y de mañana", ha insistido.
También ha abogado por reformar la Constitución para adaptarla a las reglas de convivencia del siglo XXI y ha defendido decir sí a Europa. En este punto, ha lamentado que Rajoy "lo tiene todo en b, la financiación, la contabilidad y el programa electoral" porque mientras en España dice que no aumentará impuestos y no habrá recortes, en Bruselas dice lo contrario. "No le puede salir gratis", ha concluido.