Afirma que será un eje de la Presidencia española de la Unión, que debe reaccionar ante las políticas proteccionistas de China y EE.UU.
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado este jueves que la Presidencia española de la Unión Europea tendrá como uno de sus ejes el desarrollo de la autonomía estratégica del continente, para así tratar de corregir la dependencia en sectores clave como la salud, la alimentación, la energía y las tecnologías. De este modo ha asegurado que van a reindustrializar Europa para recuperar capacidades y empleos que nunca debieron perderse.
Sánchez ha hecho este llamamiento en un acto en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación después de advertir de que la amplia apertura de la economía europea, que ha traído el mayor periodo de prosperidad a nuestras sociedades, también ha generado consecuencias negativas.
Una de ellas, según ha señalado, es la dependencia estratégica con terceros países en los últimos años que a su juicio se han convertido en "una gran amenaza" para la competitividad de las empresas y también para el bienestar y la seguridad de los ciudadanos.
"Digámoslo de manera clara y sin tapujos, vamos a reindustrializar Europa y en consecuencia España, para recuperar empleos y capacidades estratégicas que nunca debimos perder", ha trasladado.
En esta misma línea, el jefe del Ejecutivo ha advertido de que potencias como Estados Unidos y China están aumentando las barreras arancelarias y desincentivando las compra de productos procedentes de fuera de sus fronteras. "El orden internacional está cambiando y la Unión Europea debe cambiar con él", ha defendido.
ESTUDIAR LOS PUNTOS DÉBILES
Así, en la misma línea de lo que habían trasladado previamente desde Moncloa, Sánchez ha indicado que España va a impulsar un proyecto de investigación para detectar los puntos débiles de la UE en los sectores estratégicos de la energía, la salud, la alimentación y las tecnologías.
Además, ha confirmado que esperan presentar los primeros resultados de este estudio en el Consejo Informal que se va a celebrar en Granada --previsto para el mes de octubre-- y que esta perspectiva se va a incorporar en las sucesivas reuniones sectoriales de ministros que se celebren durante los seis meses de Presidencia española, que comenzará en el mes de junio.
Sánchez ha afirmado que el primer aviso serio sobre la excesiva dependencia de la UE se produjo en la pandemia de covid 19, pues fuimos conscientes de que el 73% de bienes de salud como las mascarillas los Epis o los respiradores se fabricaban fuera de la unión y resultó complicado adquirirlos por la explosión de la demanda, lo que costó "miles de vidas".
DETRÁS DE LA INFLACIÓN
Los problemas en las cadenas de suministros generados por la pandemia, generaron más desabastecimientos en elementos básicos como el aluminio, el cobre o los microchips, necesarios para construir toda clase de bienes, según ha relatado.
Por tanto las listas de espera para adquirir ciertos productos se dispararon, y se empezó a generar un proceso inflacionario, "el gran enemigo" a día de hoy, según lo ha calificado, que se vio agravado tras el inicio de la guerra en Ucrania y el corte de gas procedente de Rusia, del que Europa dependía en un alto porcentaje.
Para Sánchez buena parte de los problemas que han padecido los ciudadanos en los últimos tres años tienen como denominador común "la excesiva dependencia" de terceros países en los ámbitos citados previamente.
Además, ha advertido de que estas vulnerabilidades son solo "la punta del icerberg" y hay muchas otras dependencias que podrían faltar en el futuro cercano. En este punto ha mencionado el software de almacenamiento, los paneles solares, los fertilizantes o la materias primas críticas. En todos estos casos, según ha mencionado, la UE tiene un nivel de producción muy bajo respecto a su uso.