MADRID, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
SIGUE EN DIRECTO LA CRISIS DEL PSOE
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha defendido este viernes que el "auténtico debate" que tendrán este sábado los miembros del Comité Federal es sobre el voto de los socialistas ante un gobierno de Mariano Rajoy. Su propuesta es que se decida si "se monta una gestora que lleve al partido a que gobierne Rajoy", mediante una abstención, o se mantiene el 'no' al PP y se le pone fecha ya al congreso.
Así lo ha anunciado en una comparecencia sin preguntas en la sede del partido en Ferraz, en la que ha mostrado su preocupación por la situación que atraviesa el partido y ha pedido que la cita de este sábado no se dedique a "interminables" discusiones reglamentarias.
Según ha dicho, lo que se tiene que decidir es su posición ante una investidura del presidente del Gobierno en funciones, porque "ésta y no otra es la cuestión de fondo" y "el auténtico debate" que hay que tener.
"O se monta una gestora, como algunos pretenden, para que lleve al PSOE a que gobierne Mariano Rajoy a través de la abstención, o deciden los militantes en un congreso y mantenemos el 'no' a Rajoy e intentamos un gobierno alternativo de cambio y transversal, como aprobó el Comité Federal", ha señalado el líder del PSOE, que ha defendido que él no puede "administrar" una decisión que no comparta.
Fuentes socialistas han explicado después que, con este mensaje, Sánchez ha querido "centrar el debate" de este sábado. No se trata de un cambio del orden del día, han explicado, sino que se mantiene lo previsto en la convocatoria de este jueves.
Es decir, que se someterá a votación convocar un congreso en noviembre, con primarias el 23 de octubre, y se entenderá que si Sánchez no logra sacar adelante esta propuesta, dará un paso atrás para que se monte una gestora, que él ha ligado a una abstención.
Sánchez ha hecho hincapié en su intervención en que el fondo de la crisis en su partido es sobre la posición política y, por eso, cree que es de lo que se tiene que hablar mañana. "Si el Comité Federal del PSOE decidiera cambiar su posición y pasar a la abstención, obviamente no podría administrar una decisión que no comparto", ha dicho, para después defender que sus padres le han enseñado que lo único que tiene y no puede perder es su palabra y sus convicciones.
El líder del PSOE ha recalcado que él siempre ha defendido la hoja de ruta que ha sido "establecida por el Comité Federal", que pasa por "votar 'no' a Rajoy e intentar un gobierno alternativo, transversal y de cambio", pero también ha asumido que el Comité Federal "puede cambiar esa hoja de ruta y pasar a la abstención para que gobierne Rajoy".
Sánchez ha identificado en esta posición a sus críticos, pero ha recalcado que esto no implica que crea que esto "signifique que aquellos compañeros que lo defienden estén más cerca de la derecha". "Lo que sí advierto es de sus consecuencias, del error que ello significaría para el Partido Socialista", ha remachado.
Porque cree que "la abstención abriría la puerta a la legislatura del chantaje" y está "convencido de que España no se merece cuatro años más de Rajoy", un presidente que "ha mentido sistemáticamente a la sociedad española, que con sus políticas retrógradas ha provocado desigualdad, pobreza, fractura territorial e indignación ante los eternos casos de corrupción que le afectan y de los que no ha asumido ninguna responsabilidad política".
A partir de aquí, ha defendido que el PSOE puede hablar sobre este asunto y ha apuntado que "los argumentos de unos y otros son conocidos". "El debate es sano, es democracia, nunca fractura. Yo quiero una organización que debata hasta la extenuación, que vote y una vez votado, toda la organización vaya a una detrás de la decisión", ha dicho, para después advertir de que "lo contrario, la discrepancia de voces, no hace bien" al PSOE.
Por eso, ha insistido en que "resolver el debate es indispensable y urgente". "Es importante para el PSOE y también para España que el principal partido de la izquierda transite por un único camino", ha remachado.
Y ha defendido que el lugar donde deben "expresarse" los militantes es el congreso federal, que ahora debe convocarse con carácter extraordinario después de las 17 dimisiones que se produjeron el pasado miércoles y que, sumadas a tres vacantes previas, hacen que la Ejecutiva haya perdido la mayoría de sus miembros.
A su juicio, y a diferencia de lo que sostiene el sector crítico, "se puede pensar en España y en el PSOE a la vez" porque "hay tiempo" para ello. "No debemos alargar esta situación. Es una mala situación, pero podemos empezar a resolverla mañana mismo", ha dicho.
Por eso, ha pedido "serenidad y altura de miras para este Comité" que tendrá lugar en unas horas y que, a su juicio, debe abordar la posición del PSOE en la situación política. "Esta es la cuestión de fondo, éste es el auténtico debate, mañana podemos aclararlo", ha zanjado.
Ésta es la primera vez que Sánchez se refiere a la posibilidad de su marcha del PSOE antes de un congreso. El pasado lunes, el líder de los socialistas reaccionó a la debacle electoral en Galicia y el País Vasco y a las presiones internas anunciando la convocatoria del 39 Congreso para el mes de diciembre, con unas primarias el 23 de octubre, y dos días después, aseguró que no dimitiría si el Comité Federal no daba el visto bueno a este calendario.
Esta afirmación, después de una convocatoria que ya había soliviantado al sector crítico, desató la dimisión de 17 miembros de su Ejecutiva Federal que buscaban con sus ceses hacerle caer, ya que la dirección perdía 'quorum'. El sector crítico defiende que esto sólo puede llevar a la creación de una gestora.
Sin embargo, Ferraz reaccionó asegurando que no es posible montar una gestora a nivel federal y decidió cambiar la convocatoria del Comité Federal de este sábado, para dotarle de carácter extraordinario, y someter a votación un congreso en noviembre.
Los críticos no reconocen ya legitimidad a la dirección de Pedro Sánchez y defienden que el Comité Federal sólo se puede reunir mañana para poner en marcha una gestora que dirija el proceso de sucesión.
Con las posturas enconadas, Sánchez ha decidido hacer esta comparecencia en la víspera de esta cita, que se desarrollará en un ambiente de tensión inédito, y ha querido comenzar agradeciendo las "múltiples muestras de apoyo y cariño" que, según ha dicho, "ha recibido durante la última semana". "Comparto el desgarro que sufren muchos progresistas ante esta inédita situación", ha afirmado.
Sánchez ha recalcado que fue el primer secretario general elegido por el voto directo de la militancia y ha defendido que "esa puerta abierta a una mayor democracia no puede cerrarse". "Debe permanecer abierta, defenderé que la puerta al voto de la militancia permanezca abierta para nunca cerrarse", ha insistido.