MADRID, 5 Sep. (EUROPA PRESS) - El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes que esta misma semana se pondrá en contacto con el resto de líderes de los partidos con representación parlamentaria, salvo EH Bildu, para abrir una ronda de consultas con todos ellos con el fin de encontrar "entre todos una solución al fracaso de la investidura de Mariano Rajoy y al atasco político". En rueda de prensa después de una reunión de la Permanente de la Comisión Ejecutiva Federal, el líder del PSOE ha asegurado que no se está "postulando para liderar una alternativa", "entre otras cosas" porque aún no sabe cuál es la posición del resto de fuerzas políticas, pero no ha descartado ninguna solución. Sólo ha dejado claro que el PSOE "no va a liderar otra investidura fallida" y que no va a hacer presidente a Mariano Rajoy. Sánchez ha justificado su decisión de abrir esa ronda exploratoria -cuyas reuniones tendrán el formato y la publicidad que deseen sus interlocutores-- en que, aunque Rajoy, se vaya a quedar "de brazos cruzados" tras su fracaso en la investidura, el PSOE no puede imitar esa actitud. "Esa cerrazón obliga al resto de fuerzas a hablar", ha argumentado, añadiendo que el PSOE acudirá a ese diálogo "de manera humilde y generosa" para explorar soluciones al "atasco político", pero remarcando que ese paso al frente no puede interpretarse como su postulación para ser presidente del Gobierno. "No me estoy postulando para liderar una alternativa. Somos conscientes de que los ciudadanos están cansados de ver a sus representantes abriendo rondas de negociación", ha dicho . Eso sí, ha dejado la puerta abierta a volver a presentar su candidatura a la investidura pero sólo si tiene apoyos para que salga adelante porque no tendría sentido ir a otro debate fallido. Así las cosas, su objetivo es ver qué solución propone cada partido porque está convencido de que la salida al bloqueo debe ser colectiva, máxime cuando todos sostienen que no quieren terceras elecciones. "Vamos a ver hasta dónde está dispuesto a llegar cada uno de ellos", ha dicho, incidiendo en que él no va a crear "falsa expectativas a nadie". "Voy a ir de frente", ha garantizado, sacando pecho por su coherencia y apostillando que su intención es entablar un diálogo "sincero, sin vetos ni líneas rojas". "Es necesario que España tenga un gobierno pero no un gobierno cualquiera, sino un gobierno de cambio que ponga fin a los recortes, los casos de corrupción y la falta de ejemplaridad y que recupere los derechos perdidos en todos estos años", ha manifestado. Tras varias preguntas sobre que oferta concreta va a poner sobre la mesa el PSOE en esos contactos, Sánchez se ha limitado a señalar que su propuesta es "cambio". "El país necesita cambiar", ha remarcado, incidiendo en que el objetivo de las consultas es saber por qué solución apuesta el resto de fuerzas políticas. "No tenemos que engañar a los ciudadanos y Rajoy no se tiene que engañar. El PSOE no le va a apoyar ni antes ni después de las elecciones gallegas y vascas y el resto de interlocutores tampoco se debe dejar engañar porque el PSOE es la alternativa al PP", ha enfatizado, avisando de que "cuatro años más de Rajoy solamente traerán más casos Soria". En varios tramos de su rueda de prensa, el líder del PSOE ha puesto el énfasis en que si él va a hablar con Rajoy, como le demanda constantemente Ciudadanos, el partido de Albert Rivera y el de Pablo Iglesias deberían poner fin a su "vetos cruzados" y dialogar también porque ya no son partidos emergentes, sino que están en el Parlamento y deben asumir su "responsabilidad" en la gobernabilidad de España. "La responsabilidad de Ciudadanos no es votar sí a cualquier candidato que se presente a la investidura y la de Podemos no es votar no, su responsabilidad es ofrecer alternativas constructivas a la gobernabilidad", ha remachado. "Ha llegado el momento de que hagamos todos política grande, pensemos en los españoles y no nos miremos de reojo. ¿Vinieron a cambiar la política o a bloquearla?", ha preguntado expresamente a los naranjas y los morados. Sánchez ha afirmado que el Comité Federal, máximo órgano del partido entre congresos, se reunirá cuando el PSOE tenga claras "cuáles son las soluciones que pongan todos sobre la mesa y haya novedad de cómo desbloquear la situación política". Tras remarcar que este órgano se ha reunido siete veces desde el 20 de diciembre, el líder socialista ha rehusado aventurar una fecha para esa cita que reclaman algunos dirigentes regionales y ni siquiera ha avanzado si podría tener lugar antes o después de las elecciones vascas y gallegas. "Soy un Comité Federal andante", ha ironizado, respondiendo a quienes, como el extremeño Guillermo Fernández Vara, han criticado que se acalle a los críticos. En este punto ha asegurado que él "nunca" ha "negado el debate". "Al contrario, en el PSOE las decisiones son colegiadas, las he debatido con mis compañeros y yo las he cumplido", ha dicho, remarcando la vigencia de la resolución aprobada en su último encuentro por el máximo órgano entre congresos.