MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha pedido este jueves al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que se sume al diálogo y no incumpla la ley convocando un referéndum de independencia en Cataluña. Dicho esto, ha subrayado que el plan del Ejecutivo para frenar esa posible convocatoria es velar por el cumplimiento de la ley porque "cuando se vulnera la legalidad se repone".
En una rueda de prensa en el Congreso, Sáenz de Santamaría ha asegurado que "el principal plan" del Gobierno es "trabajar para que impere la democracia, el sentido común y el respeto a la ley". "Nosotros hacemos un llamamiento al sentido común y a la legalidad, porque ése es el marco de nuestra democracia", ha dicho.
Tras pedir "seriedad" y "sentido común", Sáenz de Santamaría ha recordado tanto a la Generalitat como los dirigentes catalanes que el "respeto a la ley es el respeto a la democracia". "Y ese respeto tiene que estar por encima de otras consideraciones", ha enfatizado.
En este sentido, ha indicado que en esta legislatura debe trabajarse por la estabilidad y ha agregado que el diálogo y la moderación son "claves" para resolver cualquier asunto. Y ha reiterado que cuando no se cumple la ley lo que se abre es el "margen a la arbitrariedad" y a que puedan verse "perjudicados" los derechos de los ciudadanos.
"EL DIÁLOGO NO ES UNA OPERACIÓN SINO UNA CONVICCIÓN"
Al ser preguntada si el Gobierno tiene un plan contra el referéndum que incluye medidas concretas, como precintar colegios electorales, la vicepresidenta ha indicado "todos" deben respetar la ley y "cuando se vulnera la legalidad, se repone".
"El plan es siempre cumplir la ley y respetar los derechos fundamentales, y trabajar por Cataluña", ha abundado. En su opinión, "nadie está por encima de la democracia" y el Gobierno le corresponde "su defensa y garantizar la estabilidad".
Por eso, ha invitado de nuevo a Puigdemont a "rectificar" y sumarse al "diálogo territorial" porque tienen "temas muy importantes" en los que trabajar, como la financiación autonómica. "El diálogo no es una operación, es una convicción", ha enfatizado.
A renglón seguido, la vicepresidenta ha criticado que el Gobierno catalán se haya instalado en una dinámica de "división" y ha dicho que no conviene instalar "en la radicalidad" a los catalanes. "Detrás de todo este discurso independentista, el Gobierno tiene otra preocupación, porque se está instalando un modelo social muy radical", ha advertido.
JxSí PIDE LA COMPARECENCIA DE SANTAMARÍA
Ante el hecho de que JxSí haya pedido su comparecencia en el Parlamento catalán para dar cuenta de las medidas coercitivas que tiene previstas el Gobierno para evitar el referéndum, Sáenz de Santamaría ha admitido que le llama "poderosísimamente" la atención el hecho de que Puigdemont no vaya a la Cámara a explicar "las declaraciones" del juez Santiago Vidal.
A su entender, si tan "ávidos" están de comparecencias, que empiecen por las suyas. En concreto, JxSí ha registrado en el Parlament una petición de comparecencia para que la vicepresidenta acuda a la Comisión de Asuntos Institucionales para dar explicaciones sobre la 'operación precinto'.
Al ser preguntada si en el actual escenario ve factible una reunión entre Mariano Rajoy y Carles Puigdemont, la vicepresidenta ha señalado que el Ejecutivo del PP "siempre" estará abierto al diálogo pero dentro de la ley. "Hago un llamamiento para que todas las instituciones cumplan la ley. Si cada uno cumple su parte, será la mejor manera de responder a los ciudadanos como se merecen", ha concluido.