Rita Barberá o García-Albiol, del PP y Ramón Espinar, de Podemos, entre los senadores que no han entregado la documentación requerida
MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Senado terminará la XI legislatura sin haber examinado la declaración de actividades de 54 senadores por falta de tiempo si las Cortes Generales se disuelven, como parece previsible, el próximo 2 de mayo porque no hay un acuerdo entre los partidos políticos para formar gobierno.
Tras haber tomado posesión de su escaño en la Cámara alta el pasado mes de enero, todos los senadores debían presentar las declaraciones de sus actividades extraparlamentarias para saber si existe alguna que sea incompatible con el escaño. En este caso, deben abandonarla para mantener el cargo público.
Desde entonces, la Cámara Alta ha analizado las declaraciones de actividades de un total de 211 senadores. Así, quedan pendientes de revisión las de otros 54 parlamentarios, entre ellos, la exalcaldesa de Valencia y senadora 'popular' por designación autonómica, Rita Barberá.
Además de ella, tampoco han sido analizadas las de otros ocho senadores designados por los parlamentos autonómicos tales como Ramón Espinar y Maribel Mora, de Podemos; o Xavier García-Albiol y José Ramón Bauzá, del PP. Los 45 senadores restantes cuya actividad falta por revisar, son parlamentarios elegidos en las generales de diciembre.
"BUEN NÚMERO" PENDIENTE DE ENTREGA
La Comisión de Incompatibilidades se encarga de revisar todos los expedientes y envía al pleno los que ya ha revisado. Este martes, el Senado ha aprobado de hecho las declaraciones de 150 senadores, que se suman a las de otros 61 aprobadas ya en marzo.
El presidente de la Mesa de la Comisión de Incompatibilidades, Juanma Moreno, ha animado al "buen número de senadores" cuya documentación sigue pendiente de entrega a "cumplimentarlo a la mayor brevedad posible".
Asimismo, ha agradecido a todos los que "han renunciado a ciertas actividades, puestos públicos e incluso privados" cuya compatibilidad estaba en cuestión.
ERC ha sido el único grupo parlamentario que no ha apoyado el dictamen y se ha abstenido en la votación. La senadora independentista Mirella Cortés se ha subido a la tribuna para denunciar que sólo los grupos del PP, del PSOE y de Podemos forman parte de la comisión y reclamar la inclusión del resto de grupos en la misma "por democracia, clarividencia y transparencia".
DOS REUNIONES DESDE EL 20D
Al incorporarse a su escaño, todos los senadores --en esta legislatura un total de 265 componen la Cámara-- tienen que hacer una declaración de actividades para que la institución analice si tienen alguna al margen del Senado.
Lo hacen al inicio de cada legislatura y también deben acreditarlo aquellos senadores de designación autonómica que ya presentaron dicha declaración, a pesar de que ya fueran objeto de estudio y aprobación en su día.
En el caso de declarar alguna actividad extraparlamentaria, ésta se analiza en una ponencia de estudio para explorar si existe alguna incompatibilidad. En caso de duda, se solicita a los senadores una aclaración o más documentos al respecto.
Tras analizarlas, todas las declaraciones que no registran ninguna incompatibilidad se elevan a la Comisión de Incompatibilidades y, de ahí, van al Pleno para su aprobación definitiva. De hecho, el Senado ya dio luz verde a la declaración de actividades de 61 senadores y, en el Pleno de este martes ha aprobado otras 150.
La comisión de Incompatibilidades va trabajando según va recibiendo las documentaciones de sus señorías, han explicado a Europa Press fuentes parlamentarias. Si como todo apunta la legislatura concluye el día 2, se habrá dado el visto bueno solo a esos 211 expedientes presentados por los senadores.
ACTIVIDADES INCOMPATIBLES
La comisión revisa todas las actividades de los senadores pluriempleados para así garantizar que no perciben más de un sueldo público y que las empresas con las que están relacionados no trabajen con la Administración Pública, entre otras cosas.
Según se recoge en el Boletín Oficial de las Cortes Generales, algunas de las actividades compatibles son las clases en la Universidad y la participación en tertulias televisivas o radiofónicas así como en conferencias y cursos.
En el supuesto de que alguna de las actividades declaradas sea considerada incompatible con el escaño, los senadores deberán escoger entre el escaño o la actividad que desarrollan fuera de la Cámara alta.