Pide al Gobierno vasco que partcipe "activa y directamente" en el proceso de desarme, pero no como "mero intermediador"
BILBAO, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Sortu, Arkaitz Rodríguez, ha afirmado que "llama la atención" que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, se esté comportando en el Estado español respecto al País Vasco "como Alvaro Uribe en Colombia" en contra del proceso de paz.
Rodríguez ha pedido al Gobierno vasco que participe "activa y directamente" en el proceso de desarme, pero no como "mero intermediador" porque, "si de lo que se trata es de que ETA entregue las armas" al Gabinete de Iñigo Urkullu para que éste "se las dé a la Guardia Civil, es evidente que, para eso", la banda ETA "no necesitaría" al Ejecutivo autónomo.
El representante de la formación de la izquierda abertzale ha criticado las declaraciones realizadas este pasado martes por Zoido en repuesta al documento del EPPK en el que el Colectivo de Presos de ETA plantea "dejar a cada recluso libertad para utilizar cauces legales con el fin de lograr su excarcelación, pero les pondrá como límites "el arrepentimiento o la delación".
Ante ello, el ministro emplazó a mantenerse "firme" ante "los eufemismos que tratan de construir los verdugos y sus amigos", y afirmó que "los etarras seguirán siendo expuestos al inexpugnable imperio de la Ley".
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, el portavoz de Sortu ha comparado a Juan Ignacio Zoido con el expresidente de Colombia Alvaro Uribe y ha señalado que no entiende que "lo que al otro lado del charco es algo deseable y razonable, aquí, en su casa, se convierte en algo completamente distinto".
A su juicio, si es aprobado el documento del EPPK dentro del proceso interno entre los reclusos, va a ser "el paso definitivo". "Va a suponer un cambio importante en el panorama político y en lo que al proceso para la resolución del conflicto se refiere", ha asegurado.
En este sentido, ha recordado que el EPPK ha dicho que, con ese planteamiento, pretende "contribuir a vaciar las cárceles, al avance del proceso de soluciones y de paz", y ayudar "al avance del proceso de liberación y a la puesta en marcha y al desarrollo de un proceso soberanista". Por ello, cree que éste "es un paso muy importante en ese camino".
Arkaitz Rodríguez cree que cada vez se "eleva permanentemente el nivel de la exigencia con los presos y con la izquierda abertzale en general". En este sentido, considera que "este tipo de exigencias, lejos de tener por objeto avanzar en un proceso de soluciones, alcanzar una solución justa, estable y duradera, pretenden precisamente lo contrario, hacerlo imposible".
Desde ese punto de vista, entiende que son "razonables los dos límites" que establece el Colectivo de presos de ETA, como son "el arrepentimiento y la delación".
En este sentido, cree que el documento base del EPPK tendrá "una buena aceptación" y será aprobado porque profundiza en una decisión que el colectivo ya adoptó en diciembre de 2013 de "hacer uso también de las vías legales para facilitar la excarcelación de los presos".
Rodríguez cree que, con él, se pretende "avanzar en el proceso de paz y de soluciones, frente a la actitud permanentemente saboteadora y de agresión permanente contra ese preceso que están manteniendo los Estados español y francés".
LUHUSO
El portavoz de Sortu también se ha referido a la operación desarrollada el pasado 18 de diciembre por la Guardia Civil y las autoridades francesas, en la que detuvieron a cinco personas e intervinieron un depósito de ETA en Francia con numerosas armas, explosivos y material para hacer bombas.
En su opinión, este operativo pone de manifiesto, "no la ya nula voluntad de los Estados español y francés para avanzar en un proceso de soluciones razonable y justo, sino todo lo contrario". "No es que ya no estén haciendo nada, no es que su actitud sea inmovilista, sino que están dando pasos en la dirección contraria", ha criticado.
Tras señalar que los Gobiernos de España y Francia se niegan "furibundamente" a participar en el desarme de ETA, ha manifestado que "a los Estados no les interesa la paz porque, si se resuelven definitivamente las consecuencias del conflicto, se va a poner en toda su dimensión el debate político encima de la mesa, que es el de los derechos de este país y de la necesidad de soberanía que tiene este pueblo".
OFERTA AL GOBIERNO VASCO
Arkaitz Rodríguez ha manifestado que la vía a seguir es la implicación de la sociedad civil, como, a su juicio, ha ocurrido en Luhuso. Además, ha recordado en los escritos de ETA que se han conocido estos días y en algún medio de comunicación "aparece que hace un par de años la propia ETA se dirigió al Gobierno vasco, poponiéndole acordar un esquema, un modelo de desarme en el que participara" el Ejecutivo autónomo.
En esta línea, ha apuntado que ellos creen que el camino es el de la sociedad civil, pero que, "asimismo, un proceso de desarme ordenado y acordado requiere y exige la participación de las instituciones, y en este caso de las vascas". "Porque salta a la vista que los Gobiernos español y francés no están ahí", ha asegurado.
Además, ha criticado que, a los pocos días de conocerse las detenciones de Luhuso, el lehendakari, Iñigo Urkullu, "se descolgó con unas manifestaciones poco afortunadas, en la medida en la que vino a coincidir, en buena medida, con las tesis del Ministerio del Interior español, cuando decía que ya ni siquiera la destrucción de armas valdría porque eso supondría destruir pruebas, y que habría que analizar esas armas para ver qué responsabilidades penales nuevas podrían derivarse de ello".
"Nos preocupa escuchar ese tipo de declaraciones en boca del lehendakari. Pienso, como digo, y la propia ETA se pronunció al respecto, que el Gobierno vasco no puede limitarse a ser mero intermediador entre ETA y el Gobierno español porque, para eso, entiendo que ETA no necesita al Gobierno español", ha apuntado.
En esta línea, ha dicho que, "si de lo que se trata es de ETA entregue las armas al Gobierno vasco para que éste se las dé a la Guardia Civil, es evidente que, para eso, ETA no necesitaría al Gobierno vasco". "Entiendo que lo razonable y realmente efectivo sería que las instituciones vascas, en este caso el Gobierno vasco, participara activa y directamente en ese proceso de desarme", ha aseverado.