Las bases moradas se pronuncian sobre la consulta del partido y una de las incógnitas es la situación de Irene Montero
MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las negociaciones para conformar una candidatura de unidad a la izquierda en torno a Sumar encaran el último día de plazo para registrar las coaliciones, que se cierra la medianoche de este viernes, con diversas formaciones ya integradas y a la espera de las decisiones de las principales formaciones de este espacio, como Podemos o Compromís.
Desde el partido instrumental han manifestado optimismo y están convencidos de que habrá acuerdo, pese al "puzzle complejo" que supone aunar a una multitud de partidos progresistas, y subrayaron que no iban a esperar al límite del plazo (que termina la medianoche del viernes) para presentar la coalición.
No obstante y pese a que el escenario no era el deseado por ninguno de las partes implicadas, sobre todo tras la atropellada experiencia de la candidatura de izquierdas en Andalucía, las negociaciones de la coalición llegan hasta el último día de plazo.
Además, en el caso de los morados queda por resolver la consulta a sus bases para que se pronuncien sobre la confluencia y si deja plenos poderes a la Ejecutiva para decidir sobre el acuerdo, mientras que en Compromís se espera que el acuerdo con Sumar también llegue este viernes y sea ratificado por su máximo órgano directivo.
No obstante, en los dos casos se tendrá claro el panorama por la mañana y se estima que habrá tiempo suficiente para ajustar los flecos de cara a registrar una coalición electoral sin apurar los tiempos.
PARTIDOS QUE YA HAN DICHO SÍ A SUMAR
Hasta el momento, Sumar tiene atados ya pactos y preacuerdos con Drago Canarias, Iniciativa del Pueblo Andaluz, Batzarre (Navarra), la Chunta aragonesista, Verdes Equo y Ara Més, formación de Baleares que no estuvo en el acto del polideportivo Antonio Magariños para el lanzamiento de la candidatura de la ministra de Trabajo pero que ha optado por incorporarse a este frente amplio.
Además, la adhesión de IU y En Comú Podem se da por descontada, dado que son dos de los principales baluartes del proyecto político de la vicepresidenta segunda. Por otro lado, la formación ecologista Alianza Verde inició también conversaciones con Sumar, sin que por ahora haya comunicado su posición definitiva.
Mientras, Más Madrid ya acordó en un plenario el miércoles apoyar a Sumar pero con algunos condicionantes como la preservación de su marca en la circunscripción y que su peso se vea reflejado en las listas, acorde con los resultados del 28M.
Por su parte, los distintos partidos de Compromís (Més, Iniciativa y Verds-Equo) han convocado el Consell Nacional este viernes que deberá ratificar el previsible acuerdo con la formación de Díaz para ir en coalición a estos comicios, que se espera para entonces tenerlo atado. Y de forma similar a Más Madrid requiere liderazgo de las listas en la Comunidad Valenciana y que su nombre figure en la papeleta.
FINALMENTE HAY AUSENCIAS COMO MDYC, QUE NO CONCURRE EL 23J
Sin embargo, la sorpresa ha corrido a cargo del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC), que finalmente no se integrará en Sumar al decidir no presentarse a estos comicios y dar libertad a sus bases de cara al voto el 23F.
Su líder Fatima Hamed fue una de las dirigentes que sí acudió al acto de Magariños y ha mostrado sintonía con Díaz en repetidas ocasiones, dado que estuvo presente en el simbólico acto en Valencia de noviembre de 2021 donde compartió escenario también la vicepresidenta, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la líder de Más Madrid, Mónica García.
En el plano progresista, como estaba previsto, Adelante Andalucía no forma parte de este proceso y ha lanzado una consulta entre sus bases para decidir de qué forma concurrirá el partido en solitario a estos comicios, donde pregunta si se presenta en un única lista andaluza en Sevilla o en Cádiz.
DECISIÓN DE PODEMOS Y EL PAPEL DE LA MINISTRA DE IGUALDAD
La mayor incógnita hasta el momento es Podemos, que ha lanzado de forma exprés una consulta a la militancia que finaliza este viernes a las 10.00 horas y que básicamente consiste en que las bases avalan que la Ejecutiva del partido tenga la última decisión sobre las negociaciones y un posible acuerdo con Sumar.
Por otro lado, los morados han planteado un movimiento de última hora al proponer ir en solitario en la Comunidad Valenciana y confluir con Sumar en el resto del país, ante las dificultades de concitar un acuerdo en esa región con Compromís y apreciar vetos en esta formación. Esta opción ha sido descartada por la plataforma de Díaz al sentenciar que no lo contempla.
Las negociaciones han proseguido durante toda la jornada, donde ha trascendido que uno de los escollos es Valencia, aunque también otras voces implicadas en el proceso han deslizado que otro punto de fricción radicaría en la situación de la ministra de Igualdad, Irene Montero, dado que es un referente para el partido morado y se sospecha de que otros agentes del proceso no quieren concederle presencia en las listas o un puesto destacado.
No obstante, desde Sumar, mediante su portavoz de campaña Ernest Urtasun, ya manifestaron que no se aplican exclusiones a nadie y que esa misma posición han trasladado partidos como Compromís y Más Madrid, aunque la dirección del Podemos ya advirtió el lunes que los vetos "personales" era una forma de torpedear la unidad.
El día final de la negociación también ha llegado en una semana convulsa para Podemos y con varios dirigentes autonómicos como Galicia, Navarra y Extremadura apelando a la responsabilidad para llegar a un acuerdo con Sumar de cara a las generales, enfatizando que la unidad de la izquierda es necesaria e imprescindible. La dirigente extremeña, Irene de Miguel, instó a "dar un paso a un lado" a los que no querían el camino de la unidad.
Ayer, la actual líder de Podemos Aragón, Maru Díaz, avanzó que dejará de ser coordinadora de la formación morada tras las elecciones generales yque tampoco recogerá su acta de diputada autonómica tras el "nefasto" resultado en las pasadas elecciones del 28M. De cara a las generales y sobre la opción de frente amplio en la izquierda, pidió "altura de miras", "generosidad" y "humildad".
Por otro lado, un miembro de Podemos (Carlos Gil que figura como consejero ciudadano estatal) registró en el Ministerio del Interior un nuevo partido político denominado 'Juntas Sí se Puede', indicando para ello como dirección social la sede central de la formación morada en Madrid.
Rápidamente desde el partido indicaron que desconocían esa maniobra, que se trataba de un "error" y que rápidamente actuaron para subsanarlo pidiendo a Interior que lo borrara.