MADRID 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
Sumar y Podemos han criticado que el PP no ha roto con Vox en gobiernos autonómicos por convicción democrática sino por decisión propia de la formación dirigida por Santiago Abascal, tras su "chantaje" para rechazar el reparto de menores migrantes no acompañados entre las comunidades autónomas.
En este sentido, ambas formaciones han denunciado que aunque la ultraderecha sale de estos ejecutivos, el PP sigue asumiendo sus políticas dado que mantiene su alianza con Vox en ayuntamientos y no ha cesado a los dos consejeros díscolos de este partido en Extremadura y Castilla y León.
En rueda de prensa este lunes el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, ha desgranado que la fractura de las coaliciones autonómicas entre PP y Vox muestra la "descomposición del bloque de la derecha" y que la única opción de gobernabilidad para España es el Ejecutivo progresista.
Además, ha retado a los populares a que tienen una oportunidad de desmarcarse de Vox facilitando la aprobación de la reforma de la Ley de Extranjería, que busca blindar mecanismos de acogimiento obligatorios para menores migrantes de forma obligatoria entre las comunidades autónomas.
FEIJÓO DEBE DECIDIR SI SIGUE SUPEDITADO A ABASCAL
No obstante y pese a que la salida de la extrema derecha de gobiernos autonómicos es una "excelente noticia", Urtasun ha lamentado que esa ruptura no viene desde el "convencimiento democrático" del PP, sino por el "chantaje" de Vox en materia migratoria.
Al hilo, ha enfatizado que las coaliciones de PP con Vox perviven aún en más de 140 ayuntamientos y que los populares han incirporado políticas del programa de Vox, como la aprobación de las leyes de "desmemoria" histórica en autonomías como la Comunidad Valenciana.
Por tanto, ha apelado al PP a que debe decidir si sigue "maniatado" por Vox o se suma a las posiciones de sus socios conservadores en Europa que rechazan alianzas con la ultraderecha.
Por otro lado, ha desgranado que la fractura entre PP y Vox lanza un mensaje a la izquierda para trabajar intensamente de cara al futuro para desalojar a la derecha de gobiernos autonómicos y municipales.
PODEMOS: EL PROBLEMA ES EL PROPIO PP
Mientras, la coportavoz de Podemos, María Teresa Pérez, ha señalado también en rueda de prensa que Vox ha decidido por sí mismo salirse de los ejecutivos autonómicos que compartían con el PP, pero persisten las coaliciones de ambas formaciones en los ayuntamientos.
"Ha sido una decisión de Vox, no de Alberto Núñez Feijóo", ha remachado para proclamar que los populares no han roto con la ultraderecha a la hora de asumir sus políticas.
En consecuencia, ha advertido de que el PSOE y la "progresía" se equivocan si basta con tener a Vox fuera de las instituciones autonómicas. "El problema sigue siendo el PP", ha remachado para alertar a los socialistas que "reforzar el bipartidismo" únicamente dará a la derecha una "alfombra roja" para vencer en próximas citas electorales.