Eroski señala que en la emisión y en la publicidad hubo una supervisión "escrupulosa" de la CNMV
BILBAO, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Titulares de Aportaciones Financieras Subordinadas (AFS) de Eroski han afirmado en el juicio por la demanda colectiva de Adicae contra Eroski y BBVA por este producto que no se les informó del riesgo de las aportaciones y que desconocían su carácter perpetuo, mientras que directivos de la entidad y de Eroski han defendido que se informó de ello y de las características del producto.
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao ha acogido este martes la primera sesión del juicio por la demanda de Adicae que, en este procedimiento, representa a 68 titulares de aportaciones mayores de 60 años, después de que tres de ellos hayan retirado la demanda tras alcanzar acuerdos.
En este juicio, que se celebra unos días después de que Eroski haya anunciado un acuerdo para canjear el producto por bonos de vencimiento a largo plazo y un porcentaje de liquidez, Adicae solicita la nulidad de los contratos y la devolución de los ahorros, al considerar que hubo una comercialización "indebida" de este producto, además de "publicidad engañosa y vicio de consentimiento".
En la sesión han comparecido como testigos tres de los cinco demandantes, -elegidos por el BBVA-, mientras que otros dos no han acudido a la citación. También han ofrecido su testimonio los representantes legales de Eroski y el BBVA, así como otros tres empleados de la entidad y otros dos titulares de aportaciones, que no eran demandantes. Para este miércoles está prevista la presentación de conclusiones.
APORTACIONES
Los titulares de las aportaciones han coincidido en que no se les informó adecuadamente del producto que habían contratado y de los "riesgos del mismo". De hecho, han destacado que, si hubieran sabido lo que implicaba su contratación, no hubieran firmado la orden de compra.
En algunos casos, los demandantes han asegurado que pensaban que estaban contratando un depósito fijo y que conocieron el tipo de producto que habían adquirido a través de los medios de comunicación. Además, han indicado que eran clientes desde hace muchos años del BBVA y "confiaban" en la persona con la que contrataron el producto.
Según han explicado, fue en el banco donde les ofrecieron la posibilidad de contratar aportaciones y se les vendió como un producto "bueno" y, según un afectado, hasta "maravilloso".
Uno de los testigos ha señalado que no le "incitaron" o "presionaron" para comprar el producto, pero le trasladaron que era "interesante". En concreto, han denunciado que se "les engañó", ya que desconocían que tenía carácter perpetuo, que para recuperar su inversión tenían que acudir al mercado secundario o que podían perder su dinero. En concreto, dos de los titulares de aportaciones han asegurado que en el banco les dijeron que "a las 24 horas" podrían tener su dinero.
Los titulares de aportaciones, algunos de los cuales habían participado en más de una emisión y también contaban con otros productos financieros, han asegurado que ni siquiera se les entregó el tríptico o folleto informativo, si bien la mayoría no lo recordaba. Por otra parte, a preguntas de los letrados de Eroski, han afirmado que, en ningún momento hablaron con responsables de la cooperativa, sino con alguien del BBVA.
INFORMACIÓN
En la sesión, ha comparecido el representante legal del BBVA, que ocupa el puesto de responsable de Valores de la entidad, Jorge Olabarrieta, quien ha señalado que siempre se informa a los empleados de las sucursales sobre los productos que tienen que comercializar y que, en este caso, hubo sesiones monográficas.
El juez le ha preguntado si consideraba que era un buen producto, a lo que ha respondido que "dependiendo del perfil" del cliente. Según ha señalado, no ve razón para que alguien no invierta una parte de su capital, siempre que "comprenda el producto" y el "riesgo" del mismo.
Olabarrieta ha defendido, en todo momento, que el BBVA actuó como "mero intermediario" en la emisión y su labor no era asesorar. Según ha destacado, la emisión estaba supervisada por la CNMV y ha indicado que las AFS no tenían la garantía del banco, sino de Eroski.
Tras reconocer que le consta que se ofrecía a los clientes el producto, ha explicado que no recibían primas por colocar este producto y que al BBVA se le retribuía por la comercialización del producto en un porcentaje sobre el importe adquirido.
El responsable de la entidad ha manifestado que en las emisiones de 2004 y 2007 el producto estaba "sobredemandado" y le consta que se pudieron vender, en su momento, aportaciones en el mercado secundario. "El mercado no ha estado cerrado para este producto", ha añadido.
Sobre la información a los clientes, ha indicado que se tenía en cuenta su perfil y que se les explicaba el producto, se les entregaba el tríptico y se ponía a su disposición el folleto completo. Olabarrieta, que ha indicado que había carteles informativos en el banco, ha explicado que era Eroski la que les facilitaba toda la documentación sobre las características del producto.
También han comparecido el director una sucursal y dos directoras comerciales de distintas oficinas, quienes han asegurado que en la mayoría de los casos los clientes habían oído hablar del producto y, pese a conocerlo, se repasaban las características y riesgos del producto, una labor que también se hacía con las personas que no conocían las Aportaciones.
En concreto, han señalado que se les trasladó que era un producto perpetuo, con rentabilidad ligada al Euribor, que eran subordinadas, lo que implicaba que en caso de liquidación eran "los últimos en cobrar", y que la recuperación de la inversión era a través del mercado secundario. Además, han asegurado que los clientes entendían el significado de todo ello.
El juez les ha preguntado si les trasladaron a los clientes que podían perder todo, parte o gran parte de su inversión y el director de una entidad ha reconocido que "así de claro, no" y que "con esas palabras, no", aunque todos ellos han insistido en que informaban de los riesgos que implicaba el mercado secundario y depender de la oferta y demanda a la hora de recuperar el dinero.
Todos han negado que trasladaran a los clientes que lo que estaban contratando era un plazo fijo e incluso precisaron que no era un producto "seguro" en el que el capital estaba "garantizado". "Entendían el producto pero no veían el riesgo en aquel momento", ha añadido una de las empleadas.
Asimismo, tras indicar que la decisión última era del cliente, han señalado que se les entregaba el tríptico, el resumen del folleto informativo y el folleto completo a quien lo solicitaba, si bien los clientes no firmaban el resumen del folleto.
Por su parte, el director financiero de Eroski, Josu Mugarra, ha explicado que tuvieron reuniones con las entidades colocadoras para explicarles las características y riesgos del producto y ha añadido que la publicidad que se efectuó sobre el producto tuvo la supervisión de la CNMV.
Mugarra ha afirmado que el objetivo del lanzamiento de estas emisiones era reforzar la estructura de balance de Eroski porque estaba en pleno "proceso expansivo" con la apertura de supermercados y compra de empresas, por lo que precisaba de financiación, a pesar de que estaba en una situación de solvencia. "La emisión cumplió con cada uno de los requisitos legales y hubo en todo el proceso una supervisión escrupulosa de la CMNV", ha dicho.
Respecto al carácter perpetuo del producto, ha señalado que para que el capital pasara a ser fondos propios solo se podía hacer a perpetuidad, lo que implicaba una remuneración mayor.
Asimismo, tras destacar que Eroski ha procedido al pago de los cupones por la rentabilidad del producto y también lo hará este mes, ha asegurado que la cooperativa no podía comercializar el producto y se tenía que hacer a través de las entidades financieras.