Tres integrantes del movimiento 'Ata' reconocen en la AN un ataque a un cajero para pedir la liberación de presos de ETA

Archivo - Fachada de sala de vistas de la Audiencia Nacional, a 11 de abril de 2023, en Madrid (España).
Archivo - Fachada de sala de vistas de la Audiencia Nacional, a 11 de abril de 2023, en Madrid (España). - Alejandro Martínez Vélez - Europa Press - Archivo
Publicado: jueves, 5 septiembre 2024 12:17

MADRID 5 Sep. (EUROPA PRESS) -

Tres integrantes de Amnistia Ta Askatasuna (ATA), un colectivo disidente con la estrategia oficial de la izquierda abertzale, han reconocido este jueves en la Audiencia Nacional que atacaron con un objeto incendiario una sucursal de la entidad bancaria Kutxabank en el municipio de Ea (Vizcaya) para reivindicar la situación de los presos de ETA.

Gaizka Astorquizaga, alias 'Fito', ha aceptado 3 años de cárcel y 10 de inhabilitación, mientras que Aroa Eguia y Ander Izaguirre han aceptado 2 años de prisión y 8 meses de inhabilitación. Todos ellos estaban acusados de un delito de incendio terrorista.

'Fito' ya fue condenado a 6 años de cárcel en 2011 por la Audiencia Nacional junto a otras dos personas por colocar un explosivo en un cajero en 2009 en Bilbao. El Tribunal Supremo rebajó la pena dos años porque la bomba no llegó a estallar.

REIVINDICADO POR EL MOVIMIENTO 'ATA'

El ataque tuvo lugar sobre las 23.55 horas del 13 de mayo de 2020 después de haber pintado con espray rojo en la puerta de la sucursal el nombre del etarra Patxi Ruiz --condenado a 30 años de prisión por asesinar a Tomás Caballero, concejal de UPN, en 1998--, de golpear con una maza el cajero automático y de prenderle fuego, lo que desencadenó que echara a arder toda la fachada del edificio.

Varias dotaciones policiales se personaron diez minutos después en el lugar y, dada la magnitud del fuego, tuvo que acudir una dotación de bomberos a apagar el incendio, relataba el Ministerio Público en su escrito de acusación.

El ataque fue reivindicado por ATA --posteriormente conocido como 'Movimiento a favor de la amnistía y contra la represión'-- como parte de su campaña de sabotajes para lograr la liberación de presos de ETA.

La Fiscalía recordaba que ATA surgió tras el cese definitivo de la actividad armada por parte de ETA en 2011 y fue un colectivo disidente con la estrategia oficial de la izquierda abertzale.

Entre 2017 y 2020, ATA reivindicó una serie de actos violentos, "tanto en el lugar de los hechos mediante pasquines o con pintadas, como posteriormente por medio de comunicados remitidos a medios de comunicación, justificándolos por la situación de los presos" etarras, señalaba el Ministerio Fiscal en su escrito.