MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
La especialización de las investigaciones policiales y fiscales respecto al denominado 'ciberdelito' -delitos que se valen de las redes sociales o del uso de nuevas tecnologías- ha permitido multiplicar el número de procedimientos penales en este ámbito durante los últimos cuatro años, al pasar de 6.532 abiertos en 2011 a los 20.534 que se tramitaron a lo largo de 2014.
Así lo ha señalado la fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, durante su intervención este martes en unas jornadas sobre nuevas tendencias delictivas y reforma del Código Penal organizadas por la Asociación Profesional Española de Privacidad (APEP), donde también ha incidido en la importancia de la participación de la Fiscalía en la Estrategia Nacional de Ciberseguridad.
Madrigal ha apuntado que actualmente se avanza para dotar de mayor protección a los ciudadanos en ese campo y en dicho marco se sitúa la última reforma del Código Penal, que entra en vigor el próximo 1 de julio y que traspone normativa europea para incluir nuevos delitos como el que permitirá penar la difusión de imágenes de carácter íntimo sin necesidad de demostrar el menoscabo de la integridad moral de la víctima, como ocurre hasta el momento al no existir el tipo específico.
"SER EFICACES PERO NO A CUALQUIER PRECIO"
En el encuentro ha participado la fiscal de Sala del Tribunal Supremo de Delitos Informáticos, Elvira Tejada, quien ha incidido en la importancia de ofrecer soluciones a las nuevas conductas delictivas pero manteniendo los derechos de los ciudadanos y los valores sobre los que se asienta el Ordenamiento Jurídico.
"Tenemos que ser eficaces pero no a cualquier precio", ha afirmado la fiscal de Sala, para añadir que por ello el legislador debe hacer evolucionar la normativa a la "velocidad adecuada", sin afectar a derechos y en colaboración con otros países, al tratarse de conductas de efecto transnacional.
En este punto tanto Tejada como el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, presente asimismo en estas jornadas, han detallado ante los asistentes las principales novedades de la última reforma del Código Penal que entrarán próximamente en vigor y que pasan por la tifipicación de nuevas conductas para penar, por ejemplo, el acceso ilícito a archivos, el acoso a menores a través de las redes y el ciberterrorismo.
En este sentido se trasponen normativas europeas para lugar contra la pornografía infantil mediante novedades como la inclusión en la norma del concepto legal de pornografía a la lucha contra la pornografía técnica (no se sabe si en la imagen sale un menor, pero lo parece) o virtual (imágenes creadas por ordenador y realistas). Se pena también el acceso "on line" a este tipo de pornografía -no sólo la descarga-, y se avanza en los delitos contra la intimidad, facilitando penar la difusión de imágenes íntimas sin consentimiento.
Igualmente, la última reforma, según han explicado Tejada y Velasco a los asistentes a estas jornadas, avanza de modo importante en la lucha contra los denominados ataques informáticos masivos -penalizando la posesión de programas maliciosos que los favorezcan- o el acceso ilegal a la transmisión de datos entre sistemas -de máquina a máquina-.