Avisa que no ha conseguido acceder al perfil de Facebook del partido porque "rechazó" facilitar los permisos
MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional no ha podido "confirmar el vínculo laboral existente, si lo hubiere", entre Neurona Comunidad SL y las personas que viajaron a España para trabajar en la campaña electoral de Podemos a las elecciones generales de abril de 2019.
Así consta en las conclusiones de un informe de 19 de octubre, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que los agentes han analizado el contenido extraído de una conversación --delimitada entre el 9 de abril y el 9 de agosto de 2019-- de la aplicación de mensajería Telegram entre una testigo y el responsable de Neurona, Carlos Portillo.
Según los investigadores, en el chat figuran archivos que Portillo recibió de usuarios cuyos nombres son "coincidentes" con las "personas que dice Neurona que son sus trabajadores". Han destacado, sin embargo, que entre la información recabada consta material enviado por personal que "en fuentes abiertas figura como integrante del equipo de redes sociales de la formación de Unidas Podemos y en ningún caso como trabajador de Neurona".
"En ningún caso han sido hallados datos concluyentes en el referido chat que atribuyan la autoría de los archivos a las personas que los envían", han precisado los agentes. No es la primera vez que los investigadores ponen en duda los trabajos que se investigan. Ya en un informe redactado en marzo, la UDEF cuestionó que el material aportado por el partido al Juzgado fuese en realidad obra de la consultora Neurona.
Los agentes de la Policía Judicial han remitido el nuevo documento al Juzgado de Instrucción Número 42 de Madrid, donde el juez Juan José Escalonilla investiga un presunto delito electoral por parte de la formación 'morada'.
EL CONTRATO CON NEURONA
En el centro de las pesquisas, el magistrado instructor analiza un contrato que Podemos firmó con Neurona Comunidad por 363.000 euros que, según sospecha, sería un "contrato simulado" al considerar que "no obedeció a prestación de servicio alguno" y que tenía como finalidad "desviar el dinero pagado" a la sociedad mexicana Creative Advice Interactive.
Tras analizar una conversación en la que el responsable de Neurona Carlos Portillo asegura que "las imágenes originales son viejas" y que "no existían en alta", la UDEF ha subrayado que ello "no se ajustaría a lo plasmado en la factura emitida por la mercantil Neurona Comunidad SL por importe de 363.000 euros, ya que como consta, tanto en el detalle de la factura, así como en el Contrato de Prestación de Servicios, los vídeos son de alta definición".
En el marco del análisis, los agentes han encontrado "diversos datos objetivos que evidencian la existencia de ciertas discrepancias entre el producto entregado" por Podemos en la memoria de almacenamiento masivo y lo analizado en el chat de Telegram. Han destacado como ejemplo el hecho de que "la distinta denominación de algunos de los archivos y otros, bien sean videográficos, fotográficos y documentales, no constan en la memoria".
De los 57 archivos que figuran en el chat y que fueron "puestos en consonancia con los obrantes en la memoria de almacenamiento masivo integrada por 1.395 archivos", la UDEF ha subrayado que "cinco no constan en la referida memoria" y que "de los 52 restantes, 13 de ellos distan en la denominación de los aportados en el referido dispositivo".
Entre los documentos recogidos en el informe, los agentes han destacado unos "archivos que han sido desarrollados mediante la aplicación Adobe Premier Pro, en un proyecto denominado como Juan Carlos Money.prproj" y que tiene como usuario identificado a un hombre que "no es trabajador de Neurona".
EL PERFIL DE FACEBOOK
Según consta en el documento, la testigo --propietaria del móvil del que se ha extraído el chat-- compareció ante la Brigada de Ciberdelincuencia el pasado 8 de junio para proceder a la descarga de los "vídeos que le fueron remitidos por Portillo" y que "remitió a Facebook para su publicación".
En el apartado de conclusiones, la UDEF ha subrayado que "sin el acceso privado que Podemos rechazó facilitar no pueden ser comprobados los datos técnicos sobre las publicaciones, los datos técnicos sobre la subida de archivos, los datos técnicos de conexión y el login asociado al perfil de Facebook, los dispositivos de conexión al perfil, así como la monetización del perfil".
Asimismo, los agentes han precisado que en sede judicial y previo a la extracción de información del móvil, la testigo "procedió al borrado de determinados mensajes de texto y de contenido que figuraban en la conversación que es objeto de análisis, ya que según su valoración personal estos contenían información que comprometía la estrategia política de la formación Unidas Podemos" y que, según ella, "no eran relevantes para la investigación".
"Con relación a la veracidad de los mensajes, lo que se puede apreciar es que el intercambio de estos sí se ha realizado entre los dos dispositivos y en la fecha señalada en la extracción, no pudiéndose garantizar quién esté o no manejando el dispositivo remoto", han señalado.