BILBAO, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, considera que ETA no puede tener la "llave" de la política vasca y opina que se dan las condiciones para crear una mesa de partidos en el Parlamento vasco para llegar a un acuerdo en torno al "derecho a decidir" en la que esté presente EHAK.
En una entrevista concedida al diario 'El Mundo', recogida por Europa Press, Urkullu afirma que su pretensión es crear una mesa de partidos en la Cámara vasca para hablar de la normalización política, "sin exclusiones". Según dice, "todas las sensibilidades ideológicas tienen que tener capacidad de presencia, según lo que sea el voto de los ciudadanos", e insiste en que, en estos momentos, "se dan las condiciones de abordar esto en el Parlamento vasco".
En cuanto a la participación de EHAK en esa mesa de partidos, el dirigente jeltzale señala que esta formación "se hizo dueña de los postulados de la izquierda radical abertzale, sus parlamentarios así lo dijeron", por lo que no entiende "por qué no puede representar a esa sensibilidad ideológica en las instituciones".
Tras reconocer que habrá partidos que, en una coyuntura de violencia, se nieguen a tomar parte en esa mesa, Urkullu advierte de que eso supone "dejar gestionar todo a ETA". "Nosotros tenemos que continuar, desde la firmeza de nuestros principios, en el ejercicio de la actividad política, intentando hacer nuestro propio camino político y sin dar pie a que ETA pretenda tutelar la acción política de los vascos", defiende.
El dirigente nacionalista advierte de que no se puede dar la "llave" a ETA para que "marque la agenda, por mucho que nos condicione una práctica violenta o de terror. Nos tenemos que rebelar ante eso".
BATASUNA
En relación a Batasuna, Urkullu afirma que "tiene la oportunidad de reivindicarse a sí misma como fuerza política que quiere representar a una parte de la sociedad vasca y no estar sumisa a los designios de ETA". Tras asegurar que quiere dar "una oportunidad" al mundo de Batasuna, advierte de que "ese mundo tiene que disociarse del terror". "Con ellos, todo un mundo a construir, siempre y cuando se disocien del terror", reitera.
Urkullu asegura que la voluntad del PNV es la de lograr un acuerdo político entre diferentes sensibilidades "que interprete el derecho a decidir como la suma de voluntades, como el derecho ejercitado que traiga ilusión, no para dividir".
En ese sentido, recuerda que la ponencia política del PNV dice que el punto de partida deseado sería el de un acuerdo entre partidos políticos y entre las instituciones vascas y del Estado español". "Siempre queremos llegar a una consulta, pero previamente participamos de la necesidad de acuerdos políticos, y eso depende de muchos, y lo que no podemos hacer es escudarnos en la pretendida capacidad de veto", añade.
Urkullu recuerda que ha habido un proceso de conversaciones entre diferentes con una vocación de llegar a acuerdos, "pero, al final, fue una experiencia que no dio sus frutos". "Acogiéndonos a la resolución del Congreso, debe quedar claro que son las formaciones políticas las que hablan de política y tienen su responsabilidad ante la sociedad vasca", insiste, para agregar que "tiene que haber una habilitación, control y sanción parlamentarias".
PSOE
En su opinión, el Gobierno español tiene "una oportunidad histórica para asentar la democracia" y el PSOE, "que es quien puede ofrecer un ejercicio de respeto a un estado plurinacional frente al PP, puede satisfacer el encaje amable de los nacionalismos periféricos, una estructura jurídica, donde éstos tengan su propio desarrollo de autogobierno y capacidad de desarrollo en instituciones europeas".
Urkullu remarca que "hay elementos suficientes para que la sociedad vasca no piense, y menos los gobiernos españoles de turno, que el nacionalismo vasco renuncia a sus principios y que obvia el desarrollo del autogobierno".