Afirma que el PSOE no se ha puesto en contacto con los jeltzales para profundizar en la 'agenda vasca'
BILBAO, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari y candidato del PNV a la reelección, Iñigo Urkullu, ha insistido en que su partido no apoyará una investidura de Mariano Rajoy y se ha preguntado de qué sirve elegir un presidente de Gobierno, si no va a haber un Ejecutivo "estable" que responda a los retos que plantean las instituciones de la UE. Además, ha afirmado que el PSOE no se ha puesto en contacto con los jeltzales para profundizar en la 'agenda vasca'.
En una entrevista concedida a Onda Cero, recogida por Europa Press, Urkullu ha reiterado que se está en "una estrategia de extinción por parte de los cuatro grandes partidos políticos con representación en las Cortes Generales, y en una estrategia de bloqueo y líneas rojas".
El presidente del Gobierno vasco ha recordado que el PP tuvo una legislatura de mayoría absoluta, pero, "en lugar de entablar una relación normal con el resto de formaciones políticas e, incluso, plantear pactos de Estado, de los que España están absolutamente necesitada, hizo absolutamente lo contrario".
Asimismo, ha señalado que el PP ahora "ha optado por Ciudadanos y con una apelación expresa al PSOE, y ahí es donde está jugando el Partido Popular". "También ha dicho el PP que con el PNV 'nada', porque es un veto que le pone C's, el de no hablar con los partidos nacionalistas", ha añadido.
Por ello, cree que "no viene a cuento cuál es el planteamiento del PNV en hipótesis". "Lo que sí sabemos es cuál ha sido la realidad de la relación entre el Gobierno español y el vasco en estos cuatro años pasados, con más de 37 conflictos competenciales que tenemos con el Gobierno español, y también en el ámbito del Tribunal Constitucional o en las comisiones bilaterales", ha indicado.
A su juicio, "no ha habido ningún planteamiento de escucha ni atención ni, desde luego, respuesta en materia de inversiones económicas, industrial, de política energética, en materia de convivencia, la pacificación, de cumplimiento del Estatuto de Autonomía de Gernika y la profundización en un autogobierno actualizado".
"Está muy bien lo de la cortesía y amabilidad que se pretendió desde el primer momento frente a lo que era la imagen de la relación del Gobierno español con Cataluña, la contraposición con Euskadi, pero realmente, al margen de esto, está el contenido de las cuestiones, y yo he mantenido cinco reuniones con el presidente del Gobierno español, muy amables, pero sin respuesta", ha subrayado.
Iñigo Urkullu ha precisado que, además de el PP ha optado por Ciudadanos, que "veta a los nacionalistas", los populares también lo han hecho por el PSOE, "que le dice que no y que va a llevar el 'no' hasta el final".
"La opción alternativa queda en el PSOE. ¿Qué hace el Partido Socialista?, optar por Podemos o, en su caso, por Ciudadanos. El PSOE tiene el problema también, aun cuando no le den los números, de su relación con los partidos nacionalistas, y es una situación de bloqueo", ha reiterado.
Iñigo Urkullu ha asegurado que la situación "es muy complicada y resulta curioso que, al final, de esas estrategias de bloqueos y de líneas rojas, de 350 diputados que tiene el Congreso, de los que los cuatro grandes partidos suman 325, parezca que la responsabilidad está en los otros 25".
"Esto es lo que el PP y el PSOE deberían aclarar como dos formaciones políticas con mayor representación y, además, con una responsabilidad acumulada de Gobierno del Estado español. No sé cómo se puede desatascar esta situación, si estamos en la estrategia de vetos y líneas rojas", ha aseverado.
SIN VETOS
El presidente del Gobierno vasco cree que, para solucionar el atasco, "como principio", el PP, el PSOE y C's deberían dejar de vetar la participación de los partidos nacionalistas. En segundo lugar, ha señalado que tendría que tenerse en cuenta la 'agenda vasca' planteada por el PNV. Además, el lehendakari ha recordado que, antes del 25 de diciembre, ya dijo que, "con este Rajoy, no". "Yo no sé si hay otros Rajoy", ha dicho.
A su juicio, ahora, con el caso de Rita Barberá, se está "en una desorientación absoluta", y ha añadido que ha escuchado a Ciudadanos decir que, si ésta no dimite, "ya no es posible el acuerdo con el PP".
"Yo, realmente, el tránsito que se hace desde el veto hasta el voto favorable y pidiendo a los demás que se tapen las narices y ahora diciendo otra cosa otra vez volviendo hacia atrás, la verdad es que no lo entiendo", ha indicado, para señalar que, en todo caso, los casos de corrupción "recrudecen las posiciones resistentes de otras formaciones políticas".
Preguntado por si sería posible "una abstención general y técnica" para permitir que eche a andar un Gobierno de Mariano Rajoy, el lehendakari cree que "España está en tal situación de crisis que lo que necesita es un Gobierno estable".
"¿Qué hacemos con elegir a un Gobierno español, intentando que la legislatura arranque, si, luego, vamos a tener un Gobierno que no es estable y con los retos que tiene el Gobierno español ante las instituciones europeas?", ha reiterado.
En este sentido, ha remarcado que "nadie está hablando de lo que es la realidad de los requerimientos de las instituciones europeas". "Hoy nuevamente el señor De Guindos plantea que, si no hay unos presupuestos en plazo, podemos tener una sanción de 5.000 millones o de 6.000 millones de euros, pero nadie está hablando de que estamos 6.000 millones de euros por encima del límite en el cumplimiento del objetivo del déficit", ha dicho.
También ha apuntado que "nadie está hablando de que las instituciones europeas requirieron ya, tras la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para este año, que habría que ajustar en 7.000 millones los presupuestos y en otros 15.000 millones el año que viene".
"Si ésta es la realidad, ¿qué hacemos con elegir a un presidente del Gobierno español para que arranque la legislatura si no hay un Gobierno estable?", ha insistido.
Tras señalar que "cada uno sabrá cuál es su grado de responsabilidad" en la actual situación, ha subrayado que él ha reclamado, "desde hace muchos años", la necesidad "de pactos de Estado".
"No sé si se ha sabido interpretar esto por parte de los máximos dirigentes de las formaciones políticas con una representación amplia en el Congreso y en el senado, y que, incluso anteriormente, han tenido responsabilidades de Gobierno", ha dicho.
PACTOS EN EUSKADI
Iñigo Urkullu ha destacado que, en la próxima legislatura, en el Parlamento vasco "puede haber acuerdos estructurales, de legislatura, sin que haya gobiernos de coalición, acuerdos de legislatura o acuerdos estructurales" como el que se alcanzó entre el PNV y el PSE-EE en el año 2013 "para un pacto de reactivación económica y de generación de empleo".
"Yo estoy muy orgulloso y muy satisfecho de su grado de cumplimiento. A partir de ahí, lo que conocemos en el entramado institucional de la Comunidad Autónoma del País Vasco son Gobiernos de coalición PNV-PSE, pero, después del 25 de septiembre, habrá que ver números, programas, voluntades y disposiciones también del resto de formaciones políticas", ha dicho.
En su opinión, "en cualquier caso, el Gobierno próximo también tiene que ser, como lo ha sido éste, un Gobierno sólido y estable". "Hemos agotado la legislatura, aún habiendo gobernado en minoría, pero sabiendo alcanzar acuerdos. He referido el acuerdo con el PSE-EE, pero hemos alcanzado otros acuerdos también con el PP y con EH Bildu. Y ésa es mi disposición. A partir de lo que sean los resultados del 25 de septiembre, hablaremos", ha concluido.