Critica que el Gobierno pidiera que las reuniones con el PP fueran secretas
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
El vicepresidente y consejero de Economía, Industria, Comercio y Autónomos del Gobierno de Canarias, Manuel Domínguez, ha suplicado ayuda al Estado para afrontar la crisis migratoria que sufre el archipiélago mientras que ha visto al presidente, Pedro Sánchez, "empeñado" en enfrentar a las comunidades autónomas.
Así lo ha dicho durante su intervención en el Encuentro Informativo de Europa Press que has tenido lugar este jueves en Madrid, donde hizo especial hincapié en que el archipiélago está "sumamente preocupado" por una crisis humanitaria "jamás vivida" en ningún rincón de España.
"Nunca antes habíamos sufrido una situación como esta. Una situación en donde no soy capaz siquiera de dar cifras porque cada vez que ponemos una cifra, pasadas unas horas quedan desfasadas", observó para recordar que en la actualidad son 5.600 los menores no acompañados que tutela la CCAA, 30.829 los inmigrantes irregulares que han llegado a las islas este año y que cada 45 minutos muere una persona intentando arribar al archipiélago.
Por ello, Domínguez aseguró no entender por qué Sánchez "sigue empeñado en la estrategia de enfrentar a las CCAA, de dividir a la sociedad entre los buenos y los malos, entre los que aceptan la inmigración y los que no, en enfrentar a los partidos políticos y en intentar romper el pacto de gobierno en Canarias... todo a costa de la inmigración".
Además, el vicepresidente de Canarias resaltó que la derivación de menores no acompañados hacia otras CCAA es "sumamente urgente", entendiendo que se necesita una política inmigración eficaz que evite que sigan saliendo personas de manera precaria y que fallecen buscando una vida mejor.
"NO PODEMOS MÁS, ESTAMOS ABSOLUTAMENTE COLAPSADOS"
"Por eso suplicamos la ayuda del Estado. No nos pueden seguir dejando solos... no podemos más, estamos absolutamente colapsados. Canarias es España, es Europa y solo pedimos que se nos trate como españoles y se nos considere como europeos. Nos preocupa la vida de esas personas y cómo tutelar a esos menores no acompañados", declaró el vicepresidente.
De igual modo, Domínguez mostró su preocupación por la imagen que se está proyectando al exterior y comentó que el archipiélago no quiere ser el mayor cementerio de Europa.
"Si alguien gobierna tiene que decidir --continuó--. Lo que seguimos sin entender es por qué no ha tomado una decisión. Si fue capaz de sacar una ley como la amnistía, me imagino que será capaz de sacar adelante situaciones como derivación de menores a otras comunidades autónomas".
Aquí, opinó que "cosa distinta es que le preocupe las declaraciones de ERC y de Junts, "que han dicho que tienen que delegar en ellos las competencias de inmigración, no sea que también le corresponda a Cataluña aceptar menores no acompañados y entonces sea un gran obstáculo".
Con todo, reiteró que el PP entiende que se tiene que producir esa derivación de menores. "Lo ha dicho el presidente Feijóo representando a doce CCAA y dos ciudades autónomas. Y no sólo lo ha dicho, sino que ha estampado su firma en un documento junto al presidente Clavijo", explicó.
PREDISPOSICIÓN A NEGOCIAR LA LEY DE EXTRANJERÍA
Por otro lado, ha incidido en que el PP siempre ha tenido la predisposición para negociar la reforma de la Ley de Extranjería con el Gobierno, "desde el minuto uno", mientras lamentó que el Gobierno haya tenido una estrategia de "buscar un culpable" y poner el foco en los populares diciendo que el partido encabezado por Feijóo "no la apoyaría" cuando, dijo, la realidad es que no les han plantado "nada".
El vicepresidente señaló de igual modo que el Gobierno dijo que el PP no soportaría la presión de Vox. "Pero ahí está. Cinco pactos que se han roto en cinco comunidades autónomas porque el Partido Popular no aceptó ningún tipo de chantaje", expuso.
En cuanto a las "reuniones secretas", Domínguez afirmó que se trató de una "exigencia" que puso el Estado para reunirse, lo cual, destacó, no llegó a entender en ningún momento, por lo que abogó por unos encuentros "con luz y taquígrafo".
Mientras, manifestó que tiene la sensación de que el presidente del Gobierno vive "cómodo" en una situación como la que se está viviendo. "La bronca siempre le ha favorecido", matizó.
"No sé qué acto necesita el Gobierno central para que nos entienda, para que nos ayude y para que de una vez por todas alivie la presión que estamos teniendo en Canarias. El pueblo canario ha demostrado su inmensa solidaridad, nadie puede tacharle ni un solo segundo, nadie puede dudar de los canarios en cuanto a la solidaridad que hemos tenido. Siempre hemos aceptado la situación de crisis migratoria pero todo tiene un límite, todo tiene un principio y un fin, y nosotros hemos llegado al límite", concluyó.