Asume que todos han cometido errores, da por imposible el gobierno alternativo y pide explicar a los ciudadanos que sólo hay dos opciones
MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, se mantiene en que el PSOE debe votar no a un gobierno de Mariano Rajoy, pero cree que es un debate que hay que mantener. "En este momento no se dan las circunstancias para que el PP merezca nuestro apoyo, ahora bien, ese debate se debe producir", ha dicho.
En una entrevista en La Sexta, recogida por Europa Press, ha afirmado que cuando el Comité Federal del PSOE someta a votación su decisión sobre la gobernabilidad del país él decidirá el sentido de su voto, pero ha insistido en que "en este momento es claramente contrario". "El PSOE no va a entregar, no va a bajar los brazos, pero es un debate que se puede mantener con total normalidad, se debe mantener", ha dicho también.
Sin embargo, ha avisado de que no se puede empezar el debate "por la conclusión" y, sobre todo, ha pedido que se diga la verdad a los militantes, empezando por asumir que un gobierno alternativo es "imposible".
"Se debe explicar a la sociedad y a los militantes en qué situación estamos, cuál es el escenario de verdad y no las falacias, y la verdad es que no hay más que dos alternativas, ayudar a facilitar el gobierno al PP o finalmente decir que no hay posibilidad y optar por terceras elecciones", ha resumido.
En todo caso, cree que lo ocurrido en el PSOE durante la última semana "exige reflexión por todas las partes" porque todos han cometido errores, él mismo el primero, y ha llamado a "reconstruir" el partido a partir de sus valores.
HABÍA "INCOMUNICACIÓN" EN EL SENO DEL PARTIDO
Puig ha atribuido la crisis en el seno del partido --iniciada el miércoles con su dimisión y la de otras 16 personas de la Ejecutiva Federal y culminada el sábado con la renuncia de Pedro Sánchez-- a una "situación de incomunicación en el seno del partido".
Así, ha recordado que él se alejó de Sánchez cuando, el pasado mayo, la dirección federal frenó su decisión de presentar al Senado una candidatura conjunta con Podemos y Compromís. Y ha desvelado que en esa ocasión él barajó convocar a la militancia del PSPV, que era partidaria de esa decisión, pero prefirió no hacerlo "porque eso quebraba al partido".
Además, después de unos días en que se han dicho "cosas muy graves respecto a algunas personas", ha defendido que para volver a ser un partido mayoritario el PSOE tiene que ser plural, pero "no se puede tener una mirada cerrada y reorientarlo hacia posiciones que no son las del PSOE".
Por último, preguntado por la decisión de Pedro Sánchez de mantenerse como diputado, ha dejado claro que le parece "correcto". Y, sobre si se presentará o no a las primarias, ha dejado claro que, si él considera que puede unir a los militantes y presentar un proyecto alternativo, está en su derecho de hacerlo, como cualquier otro.