PAMPLONA 17 May. (EUROPA PRESS) -
Este viernes ha tenido lugar la primera reunión del grupo motor para la implantación del programa piloto Barnahus en Navarra. Este proyecto, liderado por la Dirección General de Justicia del Ejecutivo foral, está integrado por representantes de varios departamentos del Gobierno de Navarra, fiscalía, jueces, cuerpos policiales que operan en la Comunidad foral y la organización Save The Children.
El modelo nórdico Barnahus es un término tomado de la lengua islandesa que se traduce por 'La casa de los niños'. Consiste en "reunir a todos los servicios que intervienen en la atención del o la menor que pueda haber sufrido abuso, con el fin de proporcionarle un ambiente protector que permita el abordaje de las denuncias o las sospechas que al respecto puedan surgir, evitando la revictimización secundaria y asegurando, al mismo tiempo, la obtención de los testimonios con las suficientes garantías para el proceso judicial".
Para implantar este modelo en la Comunidad foral se ha creado el grupo motor, que cuenta con la colaboración de la ONG internacional Save The Children, para "establecer un mecanismo de colaboración interdepartamental estable, que se encargue de diseñar un recurso compatible con los estándares de calidad del modelo, y adaptado a los recursos y protocolos presentes en la región".
La directora general de Justicia, Maite Arenaza, ha presidido la primera reunión, agradeciendo la"colaboración y asistencia de los participantes. "Este grupo motor que hoy iniciamos es esencial para desarrollar la hoja de ruta que culmine en la implantación del modelo Barnahus de manera exitosa", ha señalado, indicando que el objetivo principal de este proyecto es "poner a la víctima en el centro, especialmente a la infancia más vulnerable".
INTEGRANTES DEL GRUPO MOTOR
El grupo motor de la Barnahus está formado por representantes del Departamento de Interior, Función Pública y Justicia, a través de la Dirección General de Justicia, del Departamento de Salud, de Educación y de Derechos Sociales.
Asimismo, también participan personal del Instituto Navarro para la Igualdad (INAI), de la fiscalía y judicatura, representantes de los servicios sociales de base, de la Fundación Incluye, del Colegio de Abogados de Pamplona (MICAP) y de los cuerpos policiales que operan en Navarra.
De forma simultánea, el Gobierno de Navarra inició el pasado noviembre la adaptación y reforma de un local que acogerá la puesta en marcha del modelo Barnahus.
Este espacio ofrecerá "un entorno amable desvinculado físicamente de las instalaciones judiciales y con las herramientas necesarias para que trabajen en él las y los diferentes profesionales especializados que intervienen en el proceso" (médicos, psicólogos, forenses, policía, fiscales y jueces) como los que lo hacen desde los cuidados y el apoyo emocional.
Este modelo "persigue una doble finalidad: por una parte, proporcionar asesoramiento a los niños, niñas y adolescentes y sus familias (y otros agentes como profesionales de servicios sociales o docentes) de cómo deben actuar ante la sospecha de un abuso sexual; y por otra, darles una atención completa, desde la exploración inicial hasta la intervención terapéutica posterior".