Siete hombres y siete mujeres que creían estar realizando inversiones legítimas han sufrido pérdidas por valor de 270.000 euros LOGROÑO 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Equipo de la Guardia Civil en La Rioja ha alertado a la ciudadanía sobre un incremento de ciberestafas relacionadas con el uso fraudulento de programas de acceso remoto, con 14 víctimas en Navarra y La Rioja durante los últimos meses.
Estas herramientas, concebidas inicialmente para brindar asistencia técnica, están siendo utilizadas por ciberdelincuentes para acceder de manera ilegal a dispositivos electrónicos y sustraer los ahorros de las víctimas.
En todos los casos documentados y denunciados, los estafadores se hacen pasar por 'brokers' o gestores de inversiones en 'trading'. Su estrategia consiste en la captación inicial mediante anuncios atractivos -publican anuncios en redes sociales, sitios web y foros que prometen ganancias rápidas y fáciles a través de inversiones en trading de criptomonedas-; mensajes directos -contactan a las personas directamente por redes sociales, SMS, correos electrónicos o incluso llamadas telefónicas con ofertas exclusivas de inversión-; y testimonios falsos -utilizan reseñas y casos de éxito falsificados para ganar confianza-.
Se presentan como expertos en inversiones con títulos, certificados o experiencia falsificados y muestran plataformas de trading falsas que simulan operaciones reales con ganancias ficticias.
Convencen a las víctimas para realizar una aportación inicial de 250 euros en criptomonedas, mostrando supuestos beneficios económicos mediante documentos falsificados que simulan el éxito de la inversión.
A continuación, persuaden a las víctimas para que amplíen sus aportaciones, asegurando un rendimiento aún mayor, y solicitan la instalación de programas de acceso remoto, alegando que es necesario instalar aplicaciones en los dispositivos electrónicos de las víctimas (ordenadores, teléfonos o tablets) con el pretexto de 'ayudar' a gestionar las inversiones.
Una vez instalado el programa, los estafadores obtienen acceso total a los equipos, lo que les permite manipular cuentas bancarias y, finalmente, sustraer los ahorros de las víctimas sin que estas sean conscientes de lo que ocurre. Una vez que obtienen el máximo posible de la víctima, cortan toda comunicación.
IMPACTO DE LAS ESTAFAS EN RIOJA Y NAVARRA
Durante estos últimos meses en La Rioja y Navarra, catorce personas -siete hombres y siete mujeres-, con edades entre 34 y 73 años y residentes en diferentes municipios de ambas comunidades, han sido víctimas de estos hechos.
La mayoría presenta conocimientos limitados en informática, lo que las ha convertido en un blanco fácil para las sofisticadas tácticas de ingeniería social utilizadas por los ciberdelincuentes. El impacto económico es grave, con pérdidas totales que ascienden a 270.000 euros.
La sensibilización y el acceso a recursos educativos son claves para evitar caer en estas trampas, proteger los datos personales y salvaguardar el patrimonio económico frente a este creciente tipo de amenazas.
RECOMENDACIONES
Desde la Guardia Civil recomiendan desconfiar de ofertas de inversión rápidas y seguras, no instalar aplicaciones sin comprobar su legitimidad y evitar instalar programas en sus dispositivos por solicitud de terceros desconocidos.
Aconsejan proteger sus dispositivos electrónicos y mantener los sistemas operativos actualizados, utilizando un software antivirus confiable. También recomiendan no proporcionar información confidencial, compartir datos bancarios, contraseñas o información personal por teléfono o internet con desconocidos.
Asimismo, recomienzan verificar la identidad del interlocutor: si se recibe una llamada o mensaje sospechoso, se aconseja interrumpir la comunicación y contactar directamente con la institución involucrada.
QUÉ HACER SI HA SIDO VÍCTIMA
En caso de haber sido víctima, recomiendan cambiar inmediatamente todas las contraseñas de sus cuentas, especialmente las bancarias, informar a su banco de lo ocurrido y solicitar el bloqueo de posibles operaciones fraudulentas.
También es necesario denunciar el caso ante la Guardia Civil a través de los canales oficiales o acudiendo al puesto de seguridad ciudadana más cercano. Durante el proceso se requiere proporcionar a los agentes toda la información que se tenga sobre los hechos, incluso aquella que pueda parecer mínima o irrelevante, ya que podría ser clave para la investigación.