PAMPLONA 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Pamplona contará a medio plazo con un alojamiento colaborativo de personas mayores en el barrio de San Juan. El Ayuntamiento ha dado los primeros pasos para que esta nueva modalidad residencial sea una realidad con la aprobación, por parte de la Gerencia de Urbanismo, de la licitación de su promoción, gestión y explotación. La convocatoria, realizada mediante procedimiento abierto, está dirigido a entidades sin ánimo de lucro constituidas por personas mayores de 60 años y domiciliadas en Navarra.
El objetivo es que un grupo de personas mayores autogestione su propio alojamiento de forma colaborativa, promoviendo así la autonomía. Para ello, el Ayuntamiento de Pamplona ofrece una parcela de 4.076,44 metros cuadrados en el barrio de San Juan, que linda al norte con el paseo 25 de Noviembre y al sur con una hilera de viviendas unifamiliares, donde poder construir el inmueble. La concesión será por un máximo de 75 años.
La entidad adjudicataria será la encargada de aportar la financiación para la construcción y el mantenimiento de los edificios dotacionales y sus instalaciones, así como para realizar la explotación. En esencia, serán los propios beneficiarios quienes promuevan y gestionen este alojamiento colaborativo, que deberá contar con criterios de sostenibilidad social, económica y medioambiental, ha informado el Consistorio.
Para poder optar a esta adjudicación, las entidades concurrentes deben contar con estatutos, tal y como recoge el Decreto Foral 92/2020. Y éstos deben prever, como mínimo, el modo de dispensar y organizar los servicios que son destinados al conjunto de personas que allí conviven; las actividades que se desarrollan a favor de la vida activa, social y saludable dentro de la comunidad; y la actividad colaborativa en la que deben implicarse las personas residentes. También se deberá recoger la planificación de un sistema de cuidados para las personas que hayan desarrollado una situación de dependencia. Por último, la entidad deberá adquirir un compromiso sobre la indivisibilidad de la propiedad de los alojamientos entre las personas usuarias del servicio.
El inmueble que surja de este contrato será el alojamiento permanente de las personas usuarias, pero será propiedad de la entidad cooperativa. Para ello, las personas usuarias que previamente tuvieran un alojamiento en propiedad, deben comprometerse a poner a disposición de Nasuvinsa su vivienda, percibiendo, en tal caso, el precio que legalmente proceda por el arrendamiento.
El alojamiento colaborativo que surja de este concurso deberá combinar espacios privativos y espacios comunes amplios, que serán una extensión de los alojamientos particulares. Dentro de esos espacios comunes, se habilitará un área de comidas, que tenga capacidad para todas las personas usuarias, varias salas polivalentes para la convivencia y para realizar actividades, una sala de atención sociosanitaria y, si el espacio lo permite, un área de jardín o zona exterior.
ACUERDO CON GOBIERNO DE NAVARRA
Este concurso público surge de un acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento de Pamplona y el departamento de Derechos Sociales, Economía Social y Empleo del Gobierno de Navarra el pasado mes de junio para promover nuevas modalidades de alojamientos para personas mayores. El Consistorio se comprometió a convocar el concurso de adjudicación y ceder, en forma de concesión, una parcela de destino dotacional público. Por su parte, el Ejecutivo foral colaboraría con el Ayuntamiento en la elaboración del pliego de condiciones de la licitación y en la tramitación de la autorización para su funcionamiento.
Ese pliego recoge, además de los requisitos que deben cumplir las entidades sin ánimo de lucro concurrentes, incluye el proceso de selección, atendiendo a las propuestas técnicas, a las económicas y a los criterios sociales que incluya cada entidad en su propuesta. Las concurrentes deberán incluir, de hecho, una propuesta técnica, explicando el proyecto de promoción, construcción y gestión del alojamiento colaborativo, explicando cómo se va a materializar el servicio colaborativo. También deberán incluir una descripción de las actividades concretas de interés público de servicio al vecindario y una memoria que justifique la solución arquitectónica elegida.
La propuesta de servicio colaborativo se valorará con un máximo de 40 puntos distribuidos en distintos aspectos como el proyecto social de atención a la dependencia sobrevenida de las personas usuarias, la prestación de servicios a las personas convivientes o la programación de actividades de interrelación con el vecindario. Por su parte, la propuesta arquitectónica podrá obtener un máximo de 30 puntos, en función de la estética y composición del edificio, la calidad e idoneidad de los materiales, la eficiencia energética, así como el equilibrio de espacios comunes y privados, entre otros aspectos. A todo ello se podrán sumar otros 20 puntos referidos a la viabilidad económica y 10 más referidos a criterios sociales. Para poder ser valoradas, las propuestas remitidas deberán obtener un mínimo de 50 puntos.
Una vez adjudicado el concurso, la entidad que resulte seleccionada deberá solicitar la licencia de construcción en un plazo máximo de un año y la de primera utilización en un plazo de tres años a partir del día siguiente al de la notificación del otorgamiento de la licencia.