PAMPLONA 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Departamento de Derechos Sociales del Gobierno foral ha firmado un convenio de colaboración con Cruz Roja Navarra para el desarrollo de un programa de alojamiento temporal de personas migrantes en situación o riesgo de exclusión social. El convenio ha sido firmado por la directora general de Inclusión y Protección Social, Gema Mañú, y la secretaria autonómica de Cruz Roja en Navarra, Marta Urdánoz.
Este programa, financiado con 90.000 euros, contempla dos recursos residenciales; uno de seis plazas para varones jóvenes de entre 18 y 30 años con estancias máximas de tres meses, y otro alojamiento temporal de 8 plazas para mujeres migrantes solas o con menores a cargo en situación de vulnerabilidad social y cuya estancia máxima es de seis meses.
En ambos casos el recurso ofrece la cobertura de necesidades básicas. También se llevan a cabo itinerarios individuales de inserción socio-laboral. Por otra parte se imparten talleres formativos para el aprendizaje de castellano y diferentes acciones de carácter ocupacional.
El acceso a estos recursos se realiza, mayoritariamente, a través de los Servicios Sociales de Navarra y los centros de atención directa a personas migrantes. Requiere de una valoración previa y del establecimiento de un plan individualizado de atención.
Durante el pasado año 2016 el centro de alojamiento temporal para jóvenes migrantes en situación de exclusión social atendió a 60 personas. Las características corresponden a jóvenes entre 18 y 30 años, mayoritariamente solteros sin hijos a cargo y principalmente de origen africano.
En el centro de alojamiento temporal para mujeres migrantes solas o con menores a cargo en situación de vulnerabilidad, se ha atendido a 46 personas. Las características corresponden a mujeres con edades comprendidas entre los 18 y 40 años y provenientes de Marruecos, Nigeria, Argelia, Sahara, Costa de Marfil, Nicaragua, Filipinas y Camerún. Tras procesos de ruptura familiar, con episodios de violencia de género y con menores a cargo, se han visto en desprotección careciendo de todo tipo de apoyo familiar, social y económico.
Para el desarrollo de este programa Cruz Roja cuenta con dos trabajadoras sociales cuyas funciones encomendadas son la ejecución de los itinerarios de inserción de las personas participantes, el desarrollo de acciones individuales como de carácter grupal, y la interlocución con los recursos normalizados de la comunidad, ha informado el Gobierno en una nota.