PAMPLONA 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
La dirección de Grupo Antolín Navarra y el comité de empresa, formado por cinco miembros de UGT, dos de CCOO y dos de ELA, han alcanzado un acuerdo en el que la compañía se compromete a "realizar las inversiones necesarias para asignar a la planta de Arazuri carga de trabajo suficiente, garantizando la actividad durante los próximos 7 años; el mantenimiento de la totalidad de la plantilla actual, así como una posible generación futura de nuevos puestos de trabajo".
El acuerdo entre Grupo Antolín y el comité de empresa, alcanzado esta pasada noche, conlleva la desconvocatoria de la huelga indefinida que estaba prevista para el próximo día 6 de febrero, ha informado UGT en un comunicado.
Según ha señalado, el acuerdo, cuya vigencia es de cuatro años (2016-2019), "responde a las exigencias que había planteado la representación social ante la empresa, de que asignase a la planta carga de trabajo suficiente para evitar el despido de la mitad de la plantilla actual (70 trabajadores), como consecuencia de la pérdida de producto para Volkswagen Navarra, tal y como había anunciado la dirección".
Por parte de la empresa, "se decide diversificar los clientes de la planta, hasta ahora exclusivamente Volkswagen, incorporando a Seat y Audi, para cuyos modelos Polo, Ibiza y Audi A1 se suministrarán piezas desde Arazuri". Concretamente, Grupo Antolín transfiere a la planta navarra la fabricación de los elevalunas de los modelos VW 270, VW 276, SE 270, SE 216 y AU 270. Para acondicionar la planta a estos nuevos procesos, Grupo Antolín realizará las inversiones necesarias entre los años 2017 y 2018.
Complementariamente, ha explicado UGT, Grupo Antolín y el comité de empresa han alcanzado un acuerdo sobre condiciones de trabajo para estos cuatro años que contiene los siguientes aspectos: mantenimiento de una jornada de trabajo similar a la de Volkswagen Navarra (1.720 horas distribuidas en 215 jornadas de 8 horas); contención salarial durante el periodo de vigencia del acuerdo; y compromiso de mantenimiento durante la vigencia de todos los puestos de trabajo fijos y creación de un número todavía no cuantificado de nuevos puestos de trabajo temporales.
Para UGT, se trata de "un acuerdo equilibrado, en el que la plantilla asume solidariamente contener los salarios a cambio de garantías de empleo para toda la plantilla y generación de nuevos puestos de trabajo".
En su opinión, "se ha conseguido el objetivo prioritario de evitar 70 despidos y el riesgo de cierre de la planta a medio plazo, cambiando un escenario radicalmente negativo por otro con garantías de futuro para la planta, un plan industrial para un periodo mínimo a 7 u 8 años, que se sostiene en inversiones, diversificación de clientes y de producto y reforzamiento de la competitividad de la planta, lo que abre la puerta a la posibilidad de optar a nuevos proyectos".
El sindicato ha afirmado, además, que se trata de "una de las pocas plantas industriales de Navarra con presencia mayoritaria de mano de obra femenina, ya que el 70% del personal son mujeres, infrarrepresentadas en el tejido industrial de la Comunidad foral".