El principal problema que atiende la entidad deriva de la soledad y advierte de un aumento en ideación suicida en la juventud
PAMPLONA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Novecientas personas han participado este domingo en Pamplona en la VI Carrera Solidaria del Teléfono de la Esperanza de Navarra. Un récord de participación en un evento cuyo principal objetivo es dar a conocer a la ciudadanía su proyecto de promoción de la salud emocional y de acompañamiento.
La prueba ha comenzado en la plaza de Antoniutti, tras el corte de la cinta, a las 11.00 horas y ha recorrido las calles del Casco Antiguo y el parque de la Taconera. Ha contado con diferentes categorías para asegurar la participación de personas de todas las edades y niveles de condición física: carreras de 5 y 10 kilómetros, una marcha solidaria de 5 kilómetros y una marcha nórdica, también de 5 kilómetros.
En declaraciones a los medios de comunicación, Begoña Arbeloa, presidenta del Teléfono de la Esperanza de Navarra, ha destacado la necesidad de que "la gente nos conozca un poco más" porque "somos un recurso de apoyo a muchísimas personas" a través del teléfono, el chat o de forma presencial. "Lo que necesitamos es que la gente nos conozca para que podamos ayudarles a encontrar ese equilibrio en su salud emocional", ha remarcado.
Arbeloa ha mostrado su alegría por el aumento en la participación en la edición de este año, con 900 personas, batiendo un récord respecto a la anterior. "Cada año tenemos unas 100 personas más que se apuntan. Es muy bonito", ha celebrado.
Según ha explicado, el principal problema que atienden desde el Teléfono de la Esperanza es el sentimiento de soledad y "todo lo que deriva de esa soledad. A veces simplemente les acompañamos y con el hecho de que nos llamen ya les estamos acompañando". "También observamos que hay mucho aumento de no ver sentido a su vida" con "ideaciones suicidas" tanto en personas mayores como en jóvenes, ha alertado.
Begoña Arbeloa ha indicado que "la necesidad mayor de las personas es que alguien les escuche". "Hay personas que están solas y no tienen a quién contar lo que les ocurre. Pero a veces también ocurre que personas que tenemos alrededor no nos escuchan o no tienen tiempo. De la forma que se vive es como cada uno va a lo suyo y ya está", ha lamentado. Así, se trata, sobre todo, de "acompañar en la escucha y, en otros momentos, orientación de posibles salidas a esa soledad", ha añadido.