Todos los barrios, salvo los de Azpilagaña, San Juan y Ermitagaña-Mendebaldea, ganan vecinos en 2017
PAMPLONA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
Pamplona volvió a crecer en 2017 y sumó 2.071 personas más en el padrón hasta alcanzar los 203.382 habitantes. Esta es la cifra de población a 2 de enero de 2018 que ha presentado el Ayuntamiento, que ha destacado que la pirámide poblacional es "muy similar" a la de hace un año con 106.957 mujeres y 96.425 hombres, una base que se mantiene con 8.627 menores de cinco años, y una población que sigue envejeciendo, ya que uno de cada cinco pamploneses supera los 65 años.
Según recogen las cifras del padrón municipal todos los barrios han ganado vecinos durante 2017 con las únicas excepciones de Azpilagaña, San Juan y Ermitagaña-Mendebaldea.
Los nuevos desarrollos urbanísticos de Lezkairu y Arrosadía sumaron población al Ensanche, con 595 vecinos más, y Milagrosa-Arrosadía, que crece 423. Estos son los barrios que más crecen. También destaca el crecimiento del Casco Antiguo, que en 2017 sumó 278 vecinos, y que en proporción a su población es "una de las subidas más importantes registradas en la ciudad". Con todo, el barrio con más vecinos sigue siendo el de la Rochapea, con 25.756 empadronados.
Las cifras del padrón, publicadas en la web municipal
(www.pamplona.es), mantienen la tendencia de crecimiento registrada desde 2014. Ese año Pamplona registró 197.781 habitantes, tras tres años de descenso de empadronados (en 2012 Pamplona tenía 199.066 habitantes). En 2015 la ciudad se recuperó hasta los 197.945 habitantes, subió a 199.403 en enero de 2016 y superó el hito de los 200.000 habitantes durante ese año, hasta llegar a 201.311 empadronados en enero de 2017.
La población inmigrante empadronada en Pamplona suma 23.200 personas, 1.651 más que hace un año, pero 1.873 menos que en el año 2012, cuando la población inmigrante en la ciudad superaba las 25.000 personas.
LA PIRÁMIDE
Como se ha apuntado, uno de cada cinco pamploneses ya ha cumplido los 65 años. Son en total 44.568 personas, 717 más que hace un año, y suponen el 21,91% del total de habitantes. La mayoría son mujeres, 26.262, frente a los 18.306 varones.
Hace seis años, en enero de 2012, el número de mayores de 65 años era de 39.512 y suponían el 19,85% de la población. Hace diez años, la cifra rondaba los 35.000 y su peso en el conjunto de la ciudad se quedaba en el 17,88%. Entre los mayores, este enero de 2018 se contabilizan 97 personas que superan los 99 años: 80 mujeres y 17 hombres.
En la base de la pirámide poblacional, sin embargo, se puede encontrar una cierta estabilización en los últimos años. Hoy, el número habitantes menores de 19 años es de 37.940 (18.594 mujeres y 19.346 hombres) y representa el 18,65% del conjunto de la población de Pamplona. Esta cifra supone un incremento de 286 personas en el último año.
Lo que sí se ha acentuado en los últimos años es la mayoría de mujeres en la ciudad. Hay 10.532 mujeres más que hombres empadronados en Pamplona, cuando hace cinco años, en enero de 2013, la diferencia se quedaba en 8.957. El barrio con más diferencia entre hombres y mujeres de la ciudad es San Juan, con 11.127 vecinas y 9.183 vecinos (ellas suponen el 54,78% de la población del barrio).
MOVIMIENTOS POR BARRIOS
El último crecimiento de población experimentado en estos últimos años tiene mucho que ver con los nuevos desarrollos urbanísticos de Lezkairu y Arrosadía. El área del Ensanche, donde se incluye a efectos de padrón buena parte de Lezkairu, ha sumado 595 vecinos entre enero de 2017 y enero de 2018. Y el área de Milagrosa-Arrosadía, que también incluye parte de Lezkairu, ha sumado 423 vecinos.
Junto a ellos, destaca el crecimiento de Casco Antiguo, con 278 vecino más, y Buztintxuri, con un aumento de 216. Por otro lado, también resalta el ligero retroceso de Azpilagaña, con 82 vecinos menos, San Juan, 48 menos, y de Ermitagaña-Mendebaldea, 23 menos, los tres únicos barrios que pierden vecinos.
Rochapea sigue siendo el barrio que concentra el mayor número de población: 25.756 habitantes, 172 vecinos más que en 2017. Le sigue de cerca la zona del Ensanche, con 24.592 vecinos, con un crecimiento el pasado año de 595, y la de Iturrama, con 23.305 y un aumento de 206.
Las siguientes son San Juan (20.310 vecinos, con una bajada de 48 vecinos con respecto a 2017), Txantrea (19.895, que sube en 98), Ermitagaña-Mendebaldea (17.209, que baja en 23) y Milagrosa-Arrosadía (16.492, que sube en 423).
Ya a distancia siguen San Jorge, con 11.919 vecinos y un crecimiento de 128 en 2017, Mendillorri, con 11.179 y un aumento de 42, el Casco Antiguo, con 11.059, Buztintxuri, con 8.835, Azpilagaña, con 7.521, y Echavacoiz, con 5.303 y un aumento de 59 vecinos.
El Consistorio ha resaltado que "la evolución de la población de los barrios en los últimos años está estrechamente ligada, lógicamente, a los desarrollos urbanísticos".
Así pues, Buztintxuri, que apenas tenía 1.942 vecinos a comienzos de 1991 superó los 5.000 en 2009 (5.436 exactamente) y hoy ya suma 8.835. Rochapea, que en 1991 sumaba 16.799 vecinos, fue acogiendo nuevos residentes a principios de los años 2000 para llegar a 24.598 en el año 2006, desde entonces los avances han sido menores.
Y la zona del Ensanche, que iba perdiendo población de forma progresiva (24.126 vecinos en 1991, 23.260 en 2001, 22.199 en 2009) ha recuperado los datos de antaño con el desarrollo de Lezkairu (23.105 en 2016, 23.997 en 2017 y 24.592 en 2018).
Son pocas las áreas que han retrocedido en población. Entre ellas está Azpilagaña, que en 1991 contaba con 8.222 vecinos y desde entonces ha ido descendiendo de forma muy ligera su población hasta los 7.521 actuales.
El Casco Antiguo, que seguía esta tendencia (tenía 11.660 vecinos en 1991 y 10.781 en 2017), ha comenzado el camino inverso para recuperarse, al menos en este último año.