Portal de Francia.
EP/AYUNTAMIENTO DE PAMPLONA
Actualizado: martes, 20 diciembre 2016 10:51

Diversos especialistas han comprobado el correcto estado del sistema de engranajes y poleas que permiten mover el tablero

PAMPLONA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

Hace ya diez años que Pamplona recuperó el puente levadizo del Portal de Francia. En esta década este elemento defensivo ha tenido un uso mucho más amable que el que forzó su diseño original: dar simbólicamente la bienvenida a los Reyes Magos de Oriente a la ciudad en la tarde de la Cabalgata de Reyes. Cada 5 de enero desde el año 2008 el tablero ha bajado gracias al sistema de engranajes de la 'Maniobra de Derché'.

Fue en 2007 cuando el Ayuntamiento de Pamplona restauró esta 'antepuerta', que data del reinado de Felipe V, reponiendo las puertas originales (1753), los mecanismos realizados en 1875 en la fundición de Salvador Pinaqui (Molino de Caparroso) y sustituyendo el tablero (puente) por uno nuevo. La intervención en la antepuerta del Portal de Francia costó 22.000 euros. Durante el año el tablero está inmovilizado y el mecanismo bloqueado con pasadores y candados y sólo se pone en funcionamiento en estas fechas.

Esta mañana técnicos municipales, representantes de la Asociación de Cabalgata de Reyes, de la Carpintería Hermanos Aldaz y de la metalistería Talleres Marcotegui, han comprobado sobre el terreno el funcionamiento de ese elemento, con su sistema de poleas, engranajes y contrapesos, engrasando el sistema y revisando todas sus partes.

La 'Maniobra de Derche' es un sistema que proviene de 1875, y cuyo nombre responde al de su inventor. Es una modalidad de los llamados "puentes de cadena" que se instaló en todos los portales en 1875, en sustitución de las antiguas palancas basculantes de madera, llamadas flechas.

Entre las 10 y las 11 horas, Policía Municipal ha controlado el tránsito y el tráfico en ese punto, según ha informado el Ayuntamiento en una nota.

SISTEMA DE FUNCIONAMIENTO DEL PUENTE LEVADIZO

La 'Maniobra de Derché' permite equilibrar la fuerza necesaria para levantar el tablero con la acción de los contrapesos, haciendo posible que, mediante la acción de las cadenas, pueda subir o bajar la puerta.

Como datos relevantes cabe destacar que cada uno de los dos contrapesos que tiene el puente levadizo pesa 645 kilos y la puerta que sube y baja pesa 1,8 toneladas.

El Portal de Francia es una de las seis puertas de acceso a Pamplona de cuando la ciudad estaba totalmente rodeada de murallas, y es la única que conserva su emplazamiento y aspecto original. Sus orígenes se remontan a la época medieval, cuando la ciudad estaba dividida en tres poblaciones. En aquella etapa se conocía como 'del Abrevador' y era una de las puertas que existían en la primitiva muralla de Navarrería. Por ella entraban los peregrinos que llegaban a la ciudad a través del Camino de Santiago.

Esta denominación 'del Abrevador' que, según el historiador Juan José Martinena Ruiz, jefe del Archivo Real y General de Navarra, aparece en documentos del siglo XIV, se siguió empleando hasta el siglo XIX, aunque alternando con la más moderna de Portal de Francia.

Durante el reinado de Carlos V se acometieron obras en las murallas de Pamplona, que duraron más de dos siglos. Durante la primera fase de estas obras se inició la construcción del baluarte del Redín. Fue entonces cuando se construyó la primera puerta, el portal de arriba, el que da acceso a la calle del Carmen. Encima del arco está el escudo de Carlos V y al pie figura la fecha de construcción: 1553.

La segunda puerta, de abajo, a pesar de que el puente levadizo le da un aire medieval, es dos siglos posterior a la de arriba. En 1720, el rey Felipe V creó el Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército, a imitación del que existía en Francia. Aquellos militares elaboraron un plan general para mejorar la defensa las fortificaciones de la ciudad. En aquella época, concretamente en 1753, se construyó el portal exterior, que todavía conserva el antiguo puente levadizo y el escudo simplificado de España (lleva las armas de Castilla y León y el escusón central con las flores de lis de los Borbones, sin incluir los escudos de los Reinos de Navarra y Aragón, una composición similar a la de la puerta de Socorro de la Ciudadela).

En el interior, el portal se cubre con una bóveda de ladrillo de arco rebajado bajo la que se pueden ver las ruedas de hierro, con sus resortes, cadenas y contrapesos, que hasta el año 1915 servían para alzar el puente levadizo cada anochecer.

Más noticias

Leer más acerca de: