PAMPLONA 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
UPN ha pedido este viernes que el Gobierno foral "retire" el borrador de decreto foral que regula el uso del euskera en la Administración, que "se carga de facto la zonificación lingüística" de Navarra y "hace prácticamente imposible que nadie que no conozca el euskera pueda lograr una plaza en la Administración, ganar un concurso de traslados u obtener una jefatura".
El parlamentario de UPN Sergio Sayas ha manifestado que si el Ejecutivo foral "no rectifica este decreto, que todavía hoy es un borrador, estudiarán la posibilidad de recurrirlo" ante los tribunales de Justicia. "Y lo hará porque no se puede justificar en una Comunidad como Navarra, que no es bilingüe, la imposición de facto del euskera", ha censurado, para añadir que el borrador "no responde a la realidad sociolingüística" de la Comunidad foral.
Con las nuevas valoraciones recogidas en el texto, Sayas ha señalado que el Gobierno "impone esta lengua en una Comunidad donde la mayoría de ciudadanos no la habla". "El Gobierno impide a la gran mayoría de navarros el acceso a trabajar en la Administración, a los que están trabajando en la Administración les impide poder concursar en traslado e impide que nadie que no sepa euskera pueda conseguir una jefatura dentro de la Administración", ha expuesto.
Y es que, según ha indicado Sayas, "vale muchísimo más saber euskera que estar preparado académicamente o que tener diez años de experiencia profesional". "Con este decreto, el Gobierno está apostando por que solo las personas que conozcan euskera puedan trabajar en la Administración, y eso no se puede justificar dentro de la realidad sociolingüistica de Navarra", ha afirmado.
EN CIFRAS
Sayas ha detallado que para un concurso de traslados en la Administración, según el borrador, en la zona vascófona cuando el euskera sea mérito ("porque en el resto de plazas será obligatorio el euskera") pasará de los 2,2 puntos actuales a 9,2. "El euskera contará aquí lo mismo que 9 años de experiencia profesional y más que cualquier licenciatura o máster", ha precisado.
En la zona mixta y en servicios centrales, también en concurso de traslados, "el euskera pasará a valer 5,52 en su puntuación máxima, lo que será multiplicar prácticamente por tres la valoración actual". "Eso equivale a casi 6 años de experiencia profesional y más valoración que un máster o licenciatura", ha comentado.
Y en la zona no vascófona, "donde hoy el euskera valía 0 pasaría a valer 2.76 puntos", ha indicado Sayas, que ha añadido que "sobre todo en puestos de nivel C, D o E el euskera será determinante porque en esos puestos lo que se requiere de formación no tiene suficiente peso para contrarrestar la baremación en euskera".
Para el acceso de la Administración, ha comentado el parlamentario regionalista, en la zona vascófona el euskera podrá tener un peso del 23 por ciento del total de la puntuación; en la zona mixta y en servicios centrales, del 14 por ciento, y en a zona no vascófona, del 7 por ciento.
Finalmente, para el acceso a jefaturas en la Administración, el borrador contempla, ha expuesto Sayas, que "el euskera se valore más que 15 años de experiencia profesional en la zona vascófona; más que 10 años de experiencia en la zona mixto o servicios centrales, y en la zona no vascófona más que tener estudios universitarios".
Según ha precisado, "para acceder a una jefatura va a ser mucho mas importante saber euskera que tener una dilatada experiencia profesional". "Eso hace prácticamente imposible que nadie que no sepa euskera pueda obtener una plaza, una jefatura o un concurso de traslados", ha afirmado.
Sayas ha manifestado que el Gobierno de Navarra, con este decreto, "lo que pretende no es favorecer el euskera, sino imponerlo por la vía de los hechos". Y ha detallado que este decreto afecta también "a las empresas que contraten con la Administración y al personal que trabaja en ellas" ya que recoge "los requisitos que se van a pedir a esas empresas y prácticamente va a ser el bilingüismo".
El parlamentario de UPN ha señalado, además, que en el borrador "se abre la puerta a la creación de puestos bilingües (en los que el euskera es preceptivo) allí donde no se puede justificar". "Dice que el euskera podrá ser obligatorio en quienes presten atención general directa al público en centrales telefónicas, en oficinas de registro o recepciones, especialmente en servicios de seguridad ciudadana y atención en urgencias y en servicios de protección civil y emergencias", ha expuesto, para precisar que "es independiente de la zona donde se preste el servicio".