MADRID 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
Volkswagen prevé concluir este año las intervenciones en España relacionadas con el caso del diésel, al tiempo que mantiene su intención de invertir más de 1.000 millones de euros en la planta de Navarra para la fabricación del Polo y de otro modelo a partir de 2018, indicó la directora de la compañía en el país, Laura Ros.
"El cliente es nuestra prioridad absoluta. Queremos que para finales de este año ya esté solucionado", indicó la directora de Volkswagen en España en 'Herrera en la COPE', en alusión a las intervenciones en los vehículos diésel. "La intervención es gratuita, durará una hora y el vehículo no pierde ninguna de sus propiedades", indicó.
Ros destacó la importancia del sector del automóvil para la economía española y señaló que esta actividad "supone un 10% del PIB total del país y es uno de los pilares más fuertes". "No solo por las fábricas, sino por la industria que se desarrolla alrededor del automóvil", indicó.
La directiva afirmó que este año las matriculaciones aumentarán un 6%, hasta 1,1 millones de vehículos, lo que refleja la mejora de la economía, ya que el sector del automóvil es "un buen termómetro de los índices de consumo".
Ros destacó la importancia de la factoría de Volkswagen en Navarra, "una de las fabricas de referencias a nivel mundial", y confirmó el compromiso de la marca, que invertirá "más de 1.000 millones de euros para la fabricación del Polo y para garantizar la de otro modelo a partir del 2018".
Por otro lado, señaló que la tecnología ha modificado por completo el mundo del automóvil, que "va a cambiar más en los próximos diez años que en los últimos cien". "Estamos en un momento de disrupción", señaló.
Los próximos ejes que van a definir "la movilidad del futuro serán el vehículo eléctrico, el coche autónomo, la conectividad y las nuevas soluciones de movilidad", y apuntó que los compradores "no priorizan la propiedad, sino la movilidad".