José Cavero.- Montilla y Mas quieren un debate televisado.

MADRID 15 Oct. (OTR/PRESS) -

Montilla ha subrayado que es la primera vez que un presidente de la Generalitat propone un cara a cara con su adversario, Artur Mas. "Los que lo fueron y se presentaron a la reelección nunca lo propusieron ni aceptaron las peticiones cuando se formularon", ha dicho, en alusión expresa a CiU. El presidente catalán ha explicado que su propuesta consiste en "dos cara a cara en medios con audiencias que se complementen, uno podría ser público y otro podría ser privado, tratando, obviamente, de llegar a la máxima audiencia, al máximo de ciudadanos de Cataluña".

"No tengo problemas en el tema de los idiomas", ha asegurado. En este sentido, ha considerado que es "normal" que si se hace un debate en la televisión pública catalana sea en catalán y si se hace en una televisión "de ámbito estatal" sea en castellano. "Yo no tengo ningún interés en negar o ignorar que una parte importantísima de la sociedad catalana ve la televisión en castellano, de ahí a que sólo quiera hacer el debate en castellano va un abismo", ha dicho. A su vez, en un encuentro con representantes del mundo empresarial, Mas ha considerado un "error" las palabras de su colaborador Felip Puig. "Seguramente fueron poco oportunas, no fueron afortunadas", pero ha destacado que el secretario general adjunto de Convergencia ya ha "reconocido el error" y ha "rectificado" públicamente.

Al haber pedido ya disculpas Puig por sus afirmaciones, según Mas, el PSC "no tiene más excusas" para oponerse a seguir negociando con CiU las condiciones de un debate 'cara a cara'. Sin embargo, desde el PSC se entiende que las disculpas de Puig no son sinceras, por lo que los socialistas siguen dando por rotas las negociaciones. Mas ha negado la mayor: "Nosotros no hemos roto ninguna negociación. Si alguien la ha roto es el PSC. Sus razones tendrá". El candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat ha "desmentido" que se niegue a celebrar un debate a seis, entre todos los candidatos, paralelamente a algún 'cara a cara' con Montilla, por lo que los socialistas tampoco pueden alegar esta "excusa". En lo que no ha querido entrar a fondo Mas es en si alguno de los debates a dos con el candidato socialista debe ser en castellano: "En el tema del idioma -ha dicho- no me pienso meter. No quiero dar la excusa a nadie para que se convierta en un tema de batalla lingüística". Mas se ha declarado "harto de esta musiquita" y ha denunciado que entrar en esta polémica supone hacerle el juego a quienes desde el resto de España buscan fomentar el conflicto lingüístico.

El presidente de CiU ha recalcado que "entre el catalán y el castellano en Catalunya no existe ningún problema importante" y ha acusado al PSC y a Montilla de "pretender" generar un conflicto. "Yo no quiero convertir el 'cara a cara' en una guerra entre el catalán y el castellano", ha subrayado Mas, que ha evitado aludir directamente a las palabras del portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Durán i Lleida, quien ha asegurado que él aceptaría un debate en castellano y emitido por una debate de ámbito estatal. Para Mas, sería de "sentido común" celebrar los debates en catalán, porque es la lengua que se utiliza habitualmente en el Parlament de Catalunya y en la que se comunican personalmente él y Montilla: "Seamos consecuentes", ha pedido.

Fuentes del PSC han precisado que para reanudar los contactos, se debería aceptar que uno de los dos debates sea en castellano y no cuestionar el habitual debate televisado entre todos los candidatos con representación parlamentaria. Precisamente, el miércoles, el director de campaña del PSC, Jaume Collboni, ha asegurado que una de las condiciones que planteaba CiU para pactar los 'cara a cara' entre Montilla y Mas es que el tradicional debate 'a seis' durante la campaña fuera "de segundo nivel", sin los cabezas de lista, ha afirmado a Rac-1, según un comunicado de la emisora. Tras escuchar las explicaciones de Puig, que ha pedido disculpas por sus comentarios pero que a la vez ha acusado al PSC de aprovechar esta "anécdota" para romper los contactos, el director de campaña del PSC no ha considerado suficientes las explicaciones de Puig. Collboni ha asegurado posteriormente a COM Ràdio, según un comunicado de esta emisora, que Puig se había "reafirmado" en sus tesis, introduciendo simplemente "un matiz" a las "rotundas" declaraciones de ayer. "Me equivoqué al juzgar las intenciones del PSC, que son tan legítimas como las nuestras, y si he de rectificar lo hago", ha subrayado Puig.

Sin embargo, ha añadido que "no es coherente" que el PSC pretenda que uno de los estos dos debates sea en castellano, puesto que el catalán es la lengua habitual de relación de la clase política catalana. En consecuencia, Puig ha concluido que "si a la primera de cambio se rompen las negociaciones de una manera tan airada y tan firme", es que al PSC "no le interesaba un 'cara a cara' con Artur Mas". Puig ha asegurado que el PSC le podía haber criticado por "pasarse de rosca", pero continuar con las negociaciones de los 'cara a cara', y que en cambio ha aprovechado esta "anécdota" para romper las conversaciones. "Debe ser que no les interesa hacer un 'cara a cara' ni en castellano ni en catalán", ha lamentado Puig, que ha negado que haya recibido una reprimenda de su partido por sus comentarios. Puig ha comentado que su valoración fue "impropia" de alguien que trata de defender sus posiciones sin ofender a sus rivales, y que fue "un error" de formas.

Por su parte, la consellera de Justicia y número dos del PSC para las autonómicas, Montserrat Tura, ha afirmado que espera que su partido y CiU "reinicien" las negociaciones para pactar dos debates 'cara a cara'. El debate ha sido aprovechado por la presidenta del PP de Catalunya, Alicia Sánchez-Camacho, quien ha propuesto a todos los partidos catalanes que uno de los debates entre los candidatos de los seis partidos con representación parlamentaria sea en castellano. Camacho ha tildado de "gravísima ofensa" las palabras de Puig. Por ello, la dirigente popular ha emplazado a Mas a rectificar las palabras de su secretario general, y ha advertido de que si no lo hace, "CiU estará mostrando su verdadera cara, que es la de querer imponer una sola lengua en Catalunya".

Todos parecen querer debates. Falta concretar el cómo, cuándo y con quién...