Carmen Tomás.- La inversión en inmobiliario, tiembla.

MADRID, 7 Jun. (OTR/PRESS) -

La preocupación por la falta de acuerdo con Grecia ha dominado la semana en los mercados. Han sufrido la renta variable, las primas de riesgo y las rentabilidades de la deuda, incluso la alemana. El gobierno de Tsipras sigue jugando con fuego. Yo diría que intentado tomar el pelo a sus socios europeos y éstos empiezan a cansarse. También en Grecia empiezan a abrirse grietas tanto en la coalición de gobierno como entre los ciudadanos. Ya se empieza a hablar de nuevas elecciones, de corralitos e incluso de salir del euro. Son muy malas noticias. De hecho, la agencia de calificación Fitch no descarta un impago de Grecia. Los helenos proponían esta semana, ante la imposibilidad de realizar un pago al FMI de 300 millones de euros, reunificar este pago y los próximos en uno. Al parecer no sería la primera vez que ocurre, aunque el caso más reciente es el de Zambia.

La cuestión es que, por ejemplo, el principal indicador la bolsa española se ha dejado en la semana un 1,4 por ciento y de milagro mantuvo los 11.000 puntos; el bono a 10 años ha superado el 2,2 por ciento y la prima de riesgo vuelve a rozar los 140 puntos. Hay que señalar además que las propuestas de algunos de los partidos con posibilidades de gobernar ayuntamientos y comunidades autónomas ya han empezado a espantar inversiones y a ocasionar fugas de depósitos. Cierto que el margen de maniobra en el gasto por la Ley de Estabilidad Presupuestaria es mínimo, pero también algunos han anunciado que se saltarían la ley. La preocupación, por tanto, entre los inversores y las grandes empresas es máximo en un momento en que la economía española está creciendo a un ritmo del 3 por ciento y creando empleo ya 22 meses seguidos y en cifras espectaculares como las de mayo. Francisco Azorín en Libertad Digital cuenta que en una reunión de alto nivel celebrada en Madrid, los representantes de los más importantes fondos inmobiliarios son los más preocupados con la deriva política y no dudan en señalar que los "podemitas" matarán el mercado del alquiler y se cargarán el futuro del sector. Veremos