Actualizado 22/11/2011 13:00

Charo Zarzalejos.- Amaiur, líder en el País Vasco.

MADRID 22 Nov. (OTR/PRESS) -

La izquierda abertzale se ha lanzado en tromba a las urnas y ha logrado arañar votos al PNV. Amaiur se ha convertido en la primera fuerza política del Pais Vasco superando así las expectativas más optimistas. Es la primera fuerza en escaños pero no en votos ya que el PNV tiene en torno a 40.000 votos más que la coalición abertzale y ha logrado su objetivo de mantener grupo parlamentario propio pero con el sabor agridulce de que su más directo competidor ha obtenido unos resultados que les llena de preocupación.

El 20N ha dejado una radiografía de una Comunidad Autónoma en la que el nacionalismo, en todas sus versiones, ha obtenido11 escaños delos 18 que aporta el País Vasco al Congreso de los Diputados. El PSE ha perdido cinco escaños y el PP mantiene los tres que tenía. Los populares no han logrado beneficiarse de la ola a favor del PP siendo la única autonomía en la que no suben ni en escaños ni casi en votos. Los socialistas no rentabilizan ni el cese de la violencia ni gestionar un gobierno monocolor y los electores populares no parecen premiar el apoyo del PP al PSE.

La rotunda mayoría absoluta del PP no obvia una realidad vasca que se presenta llena de complejidad. Los resultados de Amaiur han removido el mapa electoral vasco. En otras elecciones también ha estado presente la izquierda abertzale bajo distintas siglas pero nunca antes los partidos constitucionalistas habían obtenido unos resultados tan escuetos. A la espera del análisis más detenido que hagan las fuerzas políticas vascas, Urkullu ya ha pedido a Rajoy que tenga altura de miras para gestionar el camino abierto en el País Vasco y se quiera o no, el Ejecutivo presidido por Patxi López ha comenzado su cuesta abajo. A no tardar en Euskadi se comenzará a hablar de elecciones autonómicas. Solo es cuestión de tiempo.